A los 4’ tocó su primera pelota. Fue tres minutos después de que su compinche Di María probara la heroica desde mitad de cancha. En ese momento la pisó, enganchó, hizo un caño y le cometieron falta muy cerca del área. Fue el comienzo de una actuación memorable, al que le faltó la frutilla del gol, ese que intentó hasta en la última corrida cuando se empezaba a desandar el último minuto de adicional en Wembley, la llevó 70 metros y cuando se le trabó en el último enganche, la tomó Paulo Dybala para el 3 a 0, resultado mucho más acorde a la notable superioridad de Argentina. Lionel Messi fue un león y condujo a la selección hacia una nueva conquista y se mostró muy feliz. La procesión va por dentro de esa manera .