Como todas las ciudades universitarias, Rosario está habitada por jóvenes que vienen a realizar sus estudios y transitar la vida universitaria. Además de adaptarse al ritmo de vida de la ciudad, entre los muchos desafíos que encuentran está el de la elaboración de la tesis en la etapa final de su carrera.
Escribir este trabajo final es uno de los problemas principales que enfrentan todos los estudiantes y que despierta mayores tensiones y ansiedades. Lo que podría ser el último paso para concluir la etapa universitaria se suele transformar en un dilema que no deja dormir, genera angustia y preocupación.
Pero existen formas para hacer de este proceso una instancia más de aprendizaje para lograr el objetivo de la mejor manera. Después de una investigación que llevó meses, lo ideal es presentar la tesis revisada y libre de errores para finalmente recibir el tan esperado “aprobado” y cerrar la aventura con broche de oro.
“Entre todas las consultas que me llegan, siempre aparecen la incertidumbre y las inseguridades con respecto al trabajo realizado. Esto es un problema porque dificulta advertir los propios errores. Por eso es muy necesaria una mirada ajena que pueda aportar una corrección integral más amplia”, dice Marilina Negri, fundadora y líder de Corregí tu tesis, un proyecto nacido en Rosario que ayuda a los estudiantes a finalizar sus estudios y conseguir sus objetivos.
Otro de los problemas más comunes entre los estudiantes es la tristemente célebre procrastinación. La mayoría de los tesistas sufre al darse cuenta de que ha gestionado mal su tiempo y se dejó estar: la fecha de entrega se acerca y queda todo por hacer. Para adelantarse a esta situación y evitar dolores de cabeza resulta clave armar un cronograma de trabajo.
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El desconcierto ante los manuales de estilo, lasnormas APA o los reglamentos universitarios, es siempre un punto crítico. Negri explica que la corrección “no solo limpia el texto de errores gramaticales y ortográficos, sino que permite darle un encuadre a la planificación y adapta el registro al estilo académico, por lo que garantiza un contenido coherente, preciso y a tiempo”.
Otra de las soluciones que proveen los correctores es la adecuación del texto a los manuales de citas. Según Negri, el corrector de estilo formatea y revisa todo el archivo: tablas, figuras, índices, bibliografía y anexos. “Esta iniciativa surgió ayudando a amigos a darle forma a sus trabajos de tesis y, ante la llegada de más y más consultas, fui notando que las dudas se repetían y que se podía ayudar a los estudiantes a atravesar este proceso de una manera que les permitiera reducir la tensión y además les dejara algo en el camino”, afirma.
Con la ayuda profesional, una planificación ordenada y un acompañamiento con experiencia, el tesista puede dedicar toda su atención al contenido. “En definitiva, es un trabajo colaborativo, es brindar un acompañamiento en un proceso que generalmente se hace en solitario, pero en el cual una asistencia externa es clave y determina en buena medida el resultado”, sintetiza Negri.
De esta manera, terminar la tesis no tiene por qué ser una pesadilla, sino todo lo contrario. Con la ayuda de Corregí tu tesis, el proceso se puede transformar en una forma de concluir la carrera integrando lo aprendido y logrando un trabajo que cumpla con las expectativas académicas y, sobre todo, con las propias. Llevar una tesis a buen puerto es posible con paciencia, dedicación y el auxilio de un corrector de estilo. Esa es la clave para el éxito académico.