Newell's: esta vez no falló el arquero, pero sí volvió a defeccionar la defensa

No existe grandes cuestionamientos hacia Lucas Hoyos. Algunas salidas con el pie defectuosas que rebotaron en un rival o le dieron a Gimnasia la chance del contraataque fueron algunos de sus desaciertos. Pero la derrota de Newell's contra Gimnasia por 1 a 0 no fue responsabilidad del arquero, reemplazante de Ramiro Macagno, marginado tras la caída contra Huracán.

Es más, fue sobrio en el arco. El problema de Newell’s es que se trata de un equipo débil, liviano, vulnerable. El Lobo platense no hizo gran cosa para llegar al gol y quedarse con el triunfo. El partido pasado en el Coloso, el Globo tampoco. Pero la Lepra les dio toda clase de ventajas y los perdió.

Ricardo Lunari sacó a Macagno para la visita a Gimnasia. Ni lo citó. Y se definió por Hoyos para ocupar el arco, pese a especularse con la posibilidad de que el juvenil Josué Reinatti debutase en la primera.

Una vuelta más de Lucas Hoyos

El ingreso de Hoyos fue uno más de tantos durante la temporada, debido a que en distintos momentos del año fue alternando el puesto con Macagno. Una señal de que ninguno dio señales de ser el dueño del arco.

Al menos en este regreso, Hoyos brindó mínimas seguridades. Tapó algunos remates del Lobo y anduvo firme en los centros.

En el gol de Gimnasia, no cometió ninguna falla seria. Fueron sus compañeros los que defeccionaron, en ese saque lateral del Lobo que culminó con el remate de Rodrigo Castillo.

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Si el partido anterior, Macagno quedó en la mirada de todos por los goles de Huracán, esta vez no pasó lo mismo con Hoyos. También está claro rendirá examen partido a partido, porque ninguno de los dos logró afirmarse en el arco. Y el hincha confía poco o nada en uno y otro.

Tanto o más como desconfía en el funcionamiento defensivo del equipo. Con errores tan repetidos que causan fastidio. Hasta Lunari habló de los mismos en los últimos partidos.

Pero las falencias del conjunto rojinegro se describen, no se solucionan, con rendimientos individuales bajísimos y producciones colectivas deficitarias.