Mariano Emiliano Arriaga Ferré, sin megáfono, alza un poco la voz y le pide al puñado de personas que se acerquen a él porque está "un poco disfónico". Es septiembre de 2020 y la escena es en la plaza del Centro Cívico de San Carlos de Bariloche. Allí, vistiendo un poncho azul y llevando sobre su cabeza una boina roja, anuncia que él y sus segudiroes continuarán con el raid que iniciaron en Lago Puelo un tiempo antes y que culminará en Salta "sin barbijos, sin permisos de ruta y pidiéndoles a los policías que se sumen" para contarle al país que, palabras más, palabras menos, que la pandemia no existe.
Bajo la consigna "Aliados por la Gloria–Cabalgata por la Verdad", el médico oftalmólogo fundador de la agrupación "Médicos por la verdad Argentina" comenzó en septiembre de 2020 una cabalgata por todo el país para pedirle a la población que "despierte" y que se oponga a "la campaña del miedo" que según él quieren imponer los organizadores de lo que llama "esta tremenda mentira", en referencia a la pandemia de coronavirus, definición que no se cansa de repetir en cada encuentro o entrevista que brinda.
"Médicos por la Verdad Argentina" fue creada por Arriaga junto a otros negacionistas, como las médicas China Brandolino y Roxana Bruno, para cuestionar la "tremenda mentira organizada" en torno a la epidemia de coronavirus. Es la versión local de la organización que se creó en España y que tiene adherentes en muchos países del mundo.
Arriaga, cuya matrícula médica lleva el número 79.283, según él mismo indica, llegó este domingo a Rosario y realizó una convocatoria en el Parque de las Colectividades para comentarle a la gente por qué, entre otras cosas, cuestiona la política sanitaria del gobierno nacional.
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El discurso de "Médicos por la Verdad Argentina" se basa en algunos ejes precisos: la pandemia es una "mentira" y forma parte de un complot mundial liderado por Bill Gates, el fundador de Microsoft, entre otras personalidades, para llevar al mundo a una situación de extrema pobreza.
Además, cuestionan las medidas sanitarias como el distanciamiento social y mucho más el uso de barbijos. Aseguran que los tests PCR no sirven para detectar el coronavirus y que hasta su propio creador, el bioquímico Kary Mullis, hizo esa afirmación. Algo que, según se comprobó, no es cierto.
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El primer acto del grupo Médicos por la Verdad se realizó el pasado domingo en Moreno y el río.
Afirman también que la mayoría de las muertes de pacientes con coronavirus no pueden comprobarse porque no se realizan autopsias. Destacan que es "increíble" que se confine a personas sanas y reclaman un debate científico "abierto". Llevan como bandera la afirmación de que son "censurados" y solo utilizan determinados medios tecnológicos para comunicarse.
Pero también, como uno de sus ejes centrales, cuestionan el plan de vacunación y a la vacuna en sí: aseguran que se desconocen cuáles son sus componentes y que los estudios realizados no demostraron su nivel de eficacia.
La trayectoria de Arriaga
Arriaga cuenta entre sus antecedentes laborales haberse desempeñado en el Hospital Oftalmológico Pedro Lagleyze, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y en el Hospital Naval de Ushuaia. Según su perfil de Linkedin, obtuvo un master en Política y Gestión de Salud, y Política y Salud Pública en la Universidad de Bologna, Italia. Además, participó en campañas de ayudas a comunidades wichi y toba junto al Centro de Estudiantes de la UBA. También fue médico voluntario para la Cruz Roja de Ecuador.
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En 2006, Arriaga fue acusado del delito de estafa contra la Dirección de Bienestar de la Armada (DIBA) la obra social de los integrantes de la Armada Argentina.
Según fuentes judiciales, el caso se originó cuando un afiliado de la DIBA denunció que el médico lo operó por un supuesto glaucoma, pero profesionales del Hospital Regional Ushuaia constataron -luego- que "el paciente no presentaba ninguna lesión correspondiente al acto quirúrgico mencionado y solo tenía un "pinchazo".
En 2012, según el portal El Diario del Fin del Mundo, el médico se habría publicitado como homeópata o especialista en homeopatía egresado del Instituto Universitario Maimonides con sede en Capital Federal, "titulación que no solo no pudo comprobar, ya que en su legajo de Fiscalización Sanitaria no acredita tal especialidad, sino que además en dicha Universidad, no existe registro de su paso por sus aulas", según se indicó.