El gobierno nacional anunció que la Side descubrió una red de espías rusos realizando tareas sospechosas en el país, en supuesta coordinación con Vladimir Putin. Se trata de cinco ciudadanos rusos con residencia argentina. Aunque suene inusual, no es la primera vez que esto sucede: el año pasado se descubrió que una pareja de agentes, también oriundos de Rusia, contaban con ciudadanía argentina y que estuvieron realizando tareas de espionaje en Buenos Aires por casi una década. De hecho, vivían en familia con sus hijos.
En esta ocasión, fue el vocero presidencial Manuel Adorni quien comunicó el descubrimiento de la Side en conferencia de prensa. “La Side detectó a un grupo de residentes rusos en Argentina que estaría realizando tareas sospechosas a favor de intereses geopolíticos de Rusia en estrecha comunicación con argentinos”, comenzó Adorni.
El vocero presidencial señaló dos nombres de espías rusos que fueron descubiertos por la Side realizando tareas de inteligencia, se trata de Lev Konstantinovich e Irina Yacovenko. Los agentes son pareja hace años, y se encuentran casados. Adorni puntualizó en Konstantinovich, y afirmó que era el “encargado de financiamiento y promover vínculos con colaboradores locales”.
El perfil de los nuevos espías
Sobre la nueva pareja de espías rusos descubierta en Argentina, el vocero presidencial agregó que los agentes de inteligencia forman parte de una organización íntimamente relacionada al gobierno ruso, llamada La Compañía. En ese marco, relacionó a esta entidad con otro grupo, Lakhta, liderada por el oligarca ruso Yevgeny Prigozhin hasta su muerte en agosto de 2023.
“La Compañía tiene por objetivo formar un grupo de personas leales a los intereses de Rusia para desarrollar campañas de desinformación e influencia contra el Estado argentino”, explicó Adorni.
Además, especificó que las tareas de esta organización rusa son “la creación y difusión de contenidos en redes sociales, la influencia sobre ONG locales, el desarrollo de focus groups con ciudadanos nacionales y la obtención de información política para ser usada en favor de los intereses de Rusia”.
Una familia de espías rusos
Este nuevo hecho recuerda al caso de los espías Artem Dultsev y Anna Dultseva, un matrimonio ruso que vivió durante diez años de Buenos Aires, ciudad donde nacieron incluso sus hijos, lo que les permitió obtener la ciudadanía argentina.
Con pasaportes argentinos, bajo los nombres de María Rosa Mayer Muños y Ludwig Gisch, la dupla logró pasar desapercibida por un tiempo considerable y crear la fachada de una familia “tradicional” que trabaja de manera remota con negocios en línea. Vivieron en el barrio porteño de Belgrano y mantuvieron un perfil bajo: pagaban los impuestos y enviaban a los niños a la escuela. Una familia como cualquier otra.
En cuanto a sus pasaportes argentinos, los documentos son verídicos. En ese sentido, ambos obtuvieron la ciudadanía argentina porque vivieron en Buenos Aires y tuvieron dos hijos nacidos en el Hospital Italiano de Buenos Aires. La niña nació el 14 de junio de 2013, mientras que el niño lo hizo el 5 de agosto de 2015.
Una vez que obtuvieron los pasaportes argentinos, en 2017, la familia se mudó a Eslovenía, donde se presentaron como expatriados argentinos. Al igual que en Buenos Aires, en Liubliana crearon una pantalla de familia “normal”. Enviaban a sus pequeños a la British International School.
Durante su estancia en Eslovenia, el marido, quien se hacía llamar Ludwig Gisch, dirigía una empresa informática. Por su parte, la esposa, María Rosa Mayer Muños, según su pasaporte argentino, desarrollaba un negocio de galerías de arte online. A partir de lo revelado por las investigaciones en curso, se descubrió que ambas empresas constituían una fachada.
Finalmente, en diciembre de 2022, los rusos fueron detenidos por las autoridades eslovenas y condenados a 19 meses cada uno en Liubliana tras declararse culpables de espionaje.
>> Leer más: La historia de los espías rusos con pasaporte argentino que fueron homenajeados por Putin
El año pasado fueron liberados. En agosto de 2024, fueron homenajeados por Vladimir Putin, presidente de Rusia. En un "canje" de prisiones, el matrimonio de espías fue liberado. Al llegar al aeropuerto de Moscú, luego de ser repatriados por un avión presidencial, Putín los recibió con medallas de honor y ramo de flores incluído.
putin espias.webp
Artem Dultsev y Anna Dultseva fueron recibidos con honores por Valdimir Putin al llegar a Moscú