Estados Unidos se vistió de luto nuevamente por un tiroteo masivo en una escuela. Esta vez fueron 21 víctimas pertenecientes a una localidad del Estado de Texas, Uvalde, con gran presencia latina.
Foto: Kin Man Hui / The San Antonio Express-News via AP
Dora Mendoza, abuela de la niña víctima Amerie Jo Garza, se seca sus lágrimas en el memorial de la escuela.
Meghan Markle, duquesa de Sussex, deja este jueves flores en el memorial. (AP Photo / Jae C. Hong)
Manifestación en Washington este jueves. (AP Photo/J. Scott Applewhite)
Vincent Salazar sostiene una foto de su hija, Layla Salazar, muerta en la escuela de Uvalde, Texas. (AP Photo/Dario Lopez-Mills)
Una niña lleva flores y globos para homenajear a los alumnos muertos en Texas. (Kin Man Hui/The San Antonio Express-News via AP)
Estados Unidos se vistió de luto nuevamente por un tiroteo masivo en una escuela. Esta vez fueron 21 víctimas pertenecientes a una localidad del Estado de Texas, Uvalde, con gran presencia latina.
Si bien es difícil calcular la cantidad de armas de fuego en manos privadas, cifras de la Small Arms Survey, un proyecto de investigación con sede en Suiza, estiman que ya en 2018 había en Estados Unidos unos 390 millones de armas en circulación. En base a eso, actualmente la cifra sobrepasaría los 450 millones en una nación que cuenta con 393 millones de habitantes.
Estados Unidos es el país con más civiles propietarios de armas de fuego. En base a aquella estadística, en 2018 había 120 armas por 100 habitantes, frente a 88 por cada 100 en 2011 (un crecimiento de 35% en siete años).
Una nota de BBC MUndo indica que los últimos datos difundidos sugieren que la propiedad de armas creció significativamente en los últimos años.
Un estudio publicado por Annals of Internal Medicine en febrero reveló que 7,5 millones de adultos estadounidenses, poco menos del 3% de la población, adquirieron una arma por primera vez entre enero de 2019 y abril de 2021 (dos años y cuatro meses).
Esto, a su vez, expuso a 11 millones de personas a poseer armas de fuego en sus hogares, incluidos cinco millones de niños. Aproximadamente la mitad de los nuevos propietarios de armas en ese período eran mujeres, mientras que el 40% eran negros o hispanos.
Un estudio separado, publicado por la Academia Estadounidense de Pediatría en 2021, vinculó un aumento en la posesión de armas durante la pandemia con tasas más altas de lesiones por armas entre niños.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU, un total de 45.222 personas murieron por lesiones relacionadas con armas de fuego durante 2020, el último año del que se dispone de datos completos.
Y aunque los tiroteos masivos y los asesinatos con armas de fuego generalmente atraen más la atención de los medios, el 54% del total de fallecimientos fueron suicidios, unas 24.300 muertes.
Un estudio de 2016 publicado en el American Journal of Public Health encontró que había una fuerte relación entre los niveles más altos de posesión de armas en un estado y las tasas más altas de suicidio con armas de fuego tanto para hombres como para mujeres.
En 2020, el 43% de las muertes por arma de fuego en Estados Unidos, un total de 19.384, fueron homicidios, según datos de los CDC. La cifra representa un aumento del 34% desde 2019 y un aumento del 75% en el transcurso de la década anterior.
Casi 53 personas mueren cada día por un arma de fuego en EEUU, según los datos.
Las cifras también muestran que la gran mayoría de los asesinatos en el país, el 79%, se llevaron a cabo con armas de fuego.
Esa es una proporción significativamente mayor de homicidios que en el caso de Canadá, Australia, Inglaterra y Gales, y muchas otras regiones.
Las muertes por "tiroteos masivos" que atraen la atención internacional son más difíciles de rastrear.
Según el FBI, hubo 345 "incidentes de tiradores activos" en Estados Unidos entre 2000 y 2020, que resultaron en más de 1.024 muertes y 1.828 heridos.
El ataque más mortífero de este tipo, en Las Vegas en 2017, mató a más de 50 personas y dejó 500 heridos. Sin embargo, la gran mayoría de los tiroteos masivos dejan menos de 30 muertos.
¿Quién apoya el control de armas?
A pesar de la indignación pública generalizada, el apoyo estadounidense a leyes de armas más estrictas en 2020 cayó al nivel más bajo desde 2014, según una encuesta de Gallup.
Un 52% de los estadounidenses encuestados dijeron que querían leyes de armas más estrictas, mientras que el 35% dijo que deberían seguir siendo las mismas.
El 11% de los encuestados dijo que las leyes deberían ser "menos estrictas".
Algunas restricciones a las armas de fuego son ampliamente apoyadas por todos los colores políticos, como las limitaciones que rigen la venta de armas a personas con enfermedades mentales o en listas de "vigilancia".
A pesar de años de problemas financieros y conflictos internos, la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) sigue siendo el lobby de armas más poderoso de EE.UU., con un presupuesto sustancial para influir en los miembros del Congreso sobre la política de armas.
Durante los últimos ciclos electorales, la NRA y otras organizaciones han gastado fortunas en mensajes a favor de las armas.
Una serie de imágenes difundidas por el propio equipo de Alberto Fernández ilustran, o al menos no disimulan, la debilidad de su figura
Por Mariano D'Arrigo
Por Martín Stoianovich
Por Sergio Faletto
Por Marcelo Castaños
Por Delcia Karamoschon