Grupos afines al gobierno cubano salieron este martes por segundo día a las calles de La Habana para acallar la protesta que se desató el fin de semana. A su vez, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, lanzó por Twitter dos mensajes que reflejaron la tensión que vive la isla tras las inéditas protestas del domingo. El primero dice: “La revolución cubana no va a poner la otra mejilla a quienes la atacan en espacios virtuales y reales. Evitaremos la violencia revolucionaria, pero reprimiremos la violencia contrarrevolucionaria. Quien ataca a los agentes del orden, ataca al país”. En el segundo afirma: “La contrarrevolución sueña con una guerra entre cubanos”, y añade: “No vamos a darles el gusto”.
Aunque las calles de la capital y de las principales ciudades del país amanecieron este martes de nuevo en calma —aunque con un fuerte despliegue policial—, las manifestaciones que el 11 de julio sacudieron diferentes ciudades y pueblos del país se han instalado ya en el imaginario colectivo, hasta el punto de marcar un antes y un después.
Desde el lunes, tras el llamamiento del gobierno, numerosos grupos de afines han tomado parques y espacios públicos para escenificar su adhesión a la revolución. En el Capitolio Nacional, junto al parque de la fraternidad, donde el domingo se registraron los disturbios más importantes, se reunió más de un centenar de personas al grito de “¡Viva Fidel!”, a modo de desagravio por lo sucedido la víspera.
En alguna barriada de La Habana donde hubo conatos de protesta, como en Arroyo de Naranjo, salieron grupos de leales armados con palos y bates, como sucedió durante el Maleconazo, la protesta ocurrida el 5 de agosto de 1994 que desembocó en la crisis de los balseros.
La acción de los “defensores de la revolución” gozó también de un apoyo de afuera: el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, nuevamente se alineó decididamente con la isla y dijo que grupos que atizaron la protesta “están financiados por agencias de Estados Unidos” y “cobran en la embajada de EEUU”, como el grupo “Artículo 19”.
“Artículo 19, que es una asociación periodística financiada en México por el gobierno de Estados Unidos, por la embajada de Estados Unidos, que se ha dedicado a atacarnos, dio a conocer un mensaje en apoyo a los actos de protesta”, denunció el presidente mexicano.
Castro y el PC
La situación surgida en Cuba a partir de una serie de protestas ciudadanas fue analizada en las últimas horas por el comité central del Partido Comunista (PCC) encabezado por el presidente Miguel Díaz-Canel y con la presencia de su antecesor Raúl Castro, mientras grupos de intelectuales opositores denunciaron que suman más de 100 los detenidos, entre ellos notorios disidentes.
La plana mayor del PCC y el gobierno adjudican las protestas a “provocaciones orquestadas por elementos contrarrevolucionarios, organizadas y financiadas desde Estados Unidos con propósitos desestabilizadores”, según publicó hoy el diario oficial Granma.
“Los integrantes del máximo órgano partidista abordaron además la ejemplar respuesta del pueblo al llamado del compañero Díaz-Canel a defender la Revolución en las calles lo que permitió derrotar las acciones subversivas”, agregó el reporte oficial, que reveló que la reunión se celebró el domingo último, si bien se dio a conocer hoy.
Las autoridades de la isla adjudican el impulso a las protestar a operaciones y acciones organizadas por Estados Unidos, si bien admiten una situación económica y social complicada debido a la falta de ingresos de dinero por turismo —inexistente hace un año y medio por la pandemia— y a la escasa entrada de remesas de dinero enviadas desde el exterior por restricciones impuestas por el expresidente estadounidense Donald Trump.
Detenidos
La disidencia, en tanto, afirma que desde el domingo, cuando se iniciaron las primeras manifestaciones, más de un centenar de personas han sido reportadas como detenidas, entre ellas algunos conocidos opositores como Guillermo Fariñas, el ex preso político Daniel Ferrer y el artista Luis Manuel Otero Alcántara.
De acuerdo con una lista publicada en Twitter por el opositor Movimiento San Isidro (MSI) -un grupo de intelectuales y universitarios que reclaman libertad de expresión y creación-, 114 personas habían sido detenidas o no estaban localizadas.
“Van más de 32 horas de la detención arbitraria de Luis Manuel Otero Alcántara”, dijo en otro tuit el MSI, según reprodujo la agencia de noticias AFP.
A su turno, los obispos cubanos invitaron a las autoridades a “ejercitar la escucha” y no recurrir a “la violencia” que “engendra violencia”, ante las protestas que surgieron en distintas ciudades del país por “el deterioro de la situación económica y social”, el cual “se ha acentuado de manera significativa”.
“La violencia engendra violencia, la agresividad de hoy abre heridas y alimenta rencores para mañana que costará mucho trabajo superar, por eso invitamos a todos a no incentivar la situación de crisis, sino con serenidad de espíritu y buena voluntad, ejercitar la escucha, la comprensión y la actitud de tolerancia, que tenga en cuenta y respete al otro para juntos buscar caminos de una justa y adecuada solución”, subrayaron.