Un 17 de octubre de 1950, el por entonces presidente de los argentinos, Juan Domingo Perón, enunciaba las 20 verdades de su doctrina. Entre ellas había una que rezaba: “En la Argentina los únicos privilegiados son los niños”. Durante su gobierno, junto a Evita y a la columna vertebral de su movimiento logró que esa verdad fuera, como también él decía, una realidad. Los niños pasaron a ser prioridad en la Argentina; hogares escuelas, parques como la Ciudad de los Niños, competencias deportivas como los torneos “Evita”, y complejos turísticos como los de Chapadmalal iniciaron un camino que quedó trunco tras su caída. Desde aquellos tiempos hasta hoy los niños dejaron de ser prioridad y mucho más los niños pobres. El Estado, a veces más, a veces menos, hace un aporte insuficiente. Todo queda en iniciativas de la comunidad, en el esfuerzo constante de maestros, cooperadoras, sindicatos y otros tantos actores sociales que sostienen un dique de demandas insatisfechas y de broncas proclives a estallar. Entre esos sindicatos se destaca como ninguno el suyo, señor Marcelo Andrada, porque muy por el contrario a como han actuado los diferentes políticos que pasan por la escuela en tiempo de elecciones dejando un teléfono para que una secretaria después te diga “vamos a hacer lo posible pero no podemos prometer nada”, o “ya los llamaremos”, y después nunca te llaman”, ustedes sin pasar a repartir teléfonos y promesas vienen ayudándonos cotidianamente. Esta vez es un gracias por llevar a nuestros alumnos a Chapadmalal. Es un gracias por tener presente que “los únicos privilegiados son los niños”. Mil gracias a usted y a todos los compañeros recolectores.
Griselda Roxana Rivero
DNI 22 348 215