Mi suegro tiene 84 años, trabajó toda su vida como tantos otros jubilados en este país, formó una linda familia con tres hijos, nietos, yernos y nueras. Pasó por momentos complicados de salud, donde por ser previsor pudo afrontarlo económicamente. Resumiendo, en el año 2007 ganó un juicio al Estado por una mala liquidación de haberes, por lo que debería cobrar dinero pero hasta el día de la fecha no lo cobró. Seguramente las autoridades de la Ansés estarán esperando que mi suegro muera y de esa manera no pueda disfrutar el final de su camino como se merece. No me queda otra que pensar de esta manera tan cruel, como son estas autoridades. Yo no hablo de presidente, de partidos políticos, sólo hablo (y en este caso escribo) por el derecho de un ciudadano como tantos otros, así por lo menos habla nuestra Constitución. Como lector y además de siempre escribir en esta sección, pido y exijo que le liquiden a mi suegro porque sabemos que ese fallo está en un cajón, sólo tienen que depositarlo, señores de la Ansés. Estoy seguro que alguien leerá esta carta y tendremos una respuesta. Sólo por un final del camino feliz.