Desde Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas de Rosario, hacemos saber nuestra preocupación por las expresiones publicadas en esta sección, con la firma de Mariano Savia, director de la Guardia Urbana Municipal. En la misma, el abogado reflexiona acerca de la lamentable muerte de un agente de policía, Eliseo Mansilla, y evidentemente afectado desgrana algunos conceptos que nos conmueven. En la carta destacada, el funcionario se refiere a las personas que cometen delitos como "subhumanos" y llama inexplicablemente a sus colegas abogados a no defender a quienes resulten imputados, depositando esta tarea en la defensa pública, a quienes no parece considerar colegas. Estos conceptos no trasuntarían más que las opiniones personales de un lector si no se tratara de un funcionario elegido por el intendente de la ciudad para regir los destinos de la GUM. En consecuencia, solicitamos explicación al intendente Lifschitz: queremos una respuesta donde conozcamos si respalda esta posición o si este exabrupto mereció al menos una llamada de atención de su parte. El funcionario niega la Constitución nacional, la función resocializadora de la pena, el derecho a una defensa, en fin, niega la calidad de humano a determinadas personas. La policía que intenta formar el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ya nos dio tristes ejemplos de los resultados que arroja combinar estos conceptos autoritarios con la posibilidad de establecer políticas de seguridad municipales y a tres días de un fallo ejemplar, donde se condena la barbarie, fallo que contó con su presencia, nos sorprenden en boca de un funcionario municipal de alto rango ideas que desconocen que la única solución es más estado de derecho. El terrorismo de estado debería habernos dejado mejores enseñanzas.






























