Cada vez que me subo al colectivo me pregunto si los funcionarios locales lo harán alguna vez. Y si verán como yo, cuál es el estado de las calles, que hace que los colectivos “salten” en cada bache. Si conocen que los que más viajan son los jubilados, que muchas veces no tienen asientos disponibles y las mamás con bebés, que les pasa lo mismo. Me da mucha lástima ver cómo tantas personas grandes tienen que viajar zarandeados, muchas veces parados después de haber trabajado toda una vida. Esto le pasa a mi abuela que tiene 85 años y con bastón y todo no le queda otra que trasladarse en colectivo. Y ni hablar de la poca frecuencia. La verdad es que hay que armarse de paciencia para esperar algún colectivo. Ante las propuestas de que los autos no ingresen más a la ciudad y que la gente tome transporte público, invitaría a los concejales en primer lugar y al gobierno municipal a que vivan la experiencia de trasladarse en las unidades de colectivos, y recién después, con los pies en la tierra podrán gobernar correctamente.