Las acciones y bonos soberanos bajaron tras la primera licitación de deuda en moneda extranjera en ocho años. El entusiasmo inicial de los inversores se moderó rápidamente ante las dudas que generó la tasa del nuevo bono, que se ubicó por encima de lo esperado.
En la plaza local, los títulos de deuda cayeron encabezados por el Global 2046 (-1,4%), seguido por el Bonar 2035 (-1,2%). En ese contexto, el riesgo país se ubica en torno a 634 puntos básicos.
Argentina captó u$s 1.000 millones, con la colocación de un nuevo Bonar 2029N a cuatro años, emitido bajo legislación local y con un cupón anual del 6,5%. El rendimiento al precio de corte resultó en una tasa anual de 9,26%, levemente por encima de la que esperaba el equipo económico.
Por otro lado, la inflación se aceleró en noviembre y se ubicó en el 2,5%, su mayor nivel en siete meses, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El dato del undécimo mes del año estuvo influido por el incremento sostenido en el precio de la carne. La variación acumulada de 2025 alcanzó el 27,9% .
El índice bursátil S&P Merval bajó 1,1% a 2.980.580,60 puntos, mientras que su contraparte en dólares lo hizo 1,8% a 1.976,18 puntos. Los papeles argentinos cerraron con mayoría de caídas, encabezadas por Aluar (-5,7%) y Comercial del Plata (-5,1%). En contraste, Transener subió 1,8%.
Dólar a dólar
El jueves, el Tesoro compró otros u$s 220 millones en el mercado oficial de cambios. De este modo, el Gobierno sigue juntando fondos para afrontar el vencimiento con bonistas privados el próximo 9 de enero. El miércoles la cartera que conduce Luis Caputo había adquirido u$s 50 millones.
La compra se dio luego de que en la city identificaran señales de ventas. Así lo reflejó, por ejemplo, Amilcar Collante, al estimar un desprendimiento de u$s 86 millones entre el 28 de noviembre y el 2 de diciembre.
En este marco, las reservas brutas internacionales treparon u$s 156 millones, a u$s 41.819 millones, por lo cual cortó una racha de tres bajas consecutivas. En términos netos, de acuerdo con el cálculo del economista de Open, Federico Machado, se encuentran en terreno negativo (-u$s 235 millones).
El equipo económico tiene vencimientos por u$s4 .200 millones en enero, por lo cual requiere dólares adicionales, teniendo en cuenta que el Tesoro cuenta (según los datos disponibles hasta el 5 de diciembre), con apenas u$s 210 millones depositados en el Banco Central (BCRA). Hasta el momento, por los canales mencionados, tiene en su haber cerca de u$s 1.500 millones.
En este escenario, son varias las alternativas que maneja el oficialismo para adquirir los u$s 2.700 millones restantes. Por un lado, planea recibir u$s 700 millones antes de fin de año por la privatización de cuatro centrales hidroeléctricas. Adicionalmente, existe la posibilidad de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le “perdone” al gobierno el incumplimiento de la meta de reservas y libere unos u$s 1.000 millones. Por otra parte, Economía podría avanzar con un Repo de entre u$s 5.000 millones y u$s 7.000 millones, que suele tener un mayor costo financiero. Por último, se podría activar un nuevo tramo del swap con Estados Unidos.
El último roll over
Mientras tanto, la Secretaria de Finanzas anunció la colocación de bonos de deuda en pesos por un total de $ 21,3 billones, cifra que explica un nivel de refinanciamiento respecto de los títulos que vencen en diciembre del 102,01%. Fue el único llamado del mes y último del 2025 con lo cual concluyó el programa financiero del actual ejercicio.
En la previa se estimaba que en manos de privados había unos $ 13 billones de acuerdo con estimaciones de sociedades de bolsa. Más allá de eso, el punto es que en diciembre sube la demanda de dinero como consecuencia del pago de aguinaldos. En ese contexto, sorprendió el alto nivel de dinero captado desde el gobierno. La explicación estaría en que la cuenta de pesos del Tesoro en el Banco Central tenía apenas unos $ 3,4 billones, lo que considera un nivel bajo.
Pero más allá de ello, a pesar de que el gobierno siguió con la caída de las tasas de interés, al retirar tantos pesos se estaría resecando nuevamente la plaza en una jornada en que se supo que la inflación minorista de noviembre saltó al 2,5%, por encima de las estimaciones de los privados, lo que indica una aceleración de los precios.
El dólar bajó
El dólar oficial cayó y tocó mínimos en la semana. El dólar mayorista bajó $ 1,5 y cerró a $ 1.436 para la venta tras encadenar dos rondas a la baja. El esquema de bandas cambiarias fijó para este jueves un techo de libre flotación de $1.516,5, lo que dejó al tipo de cambio oficial aún 5,6% por debajo de ese límite.
En ese marco, dentro de los financieros, el MEP avanza 0,4% a $ 1.477,20, mientras que el CCL sube 0,8% a $1.508,74, con una brecha que vuelve a superar el 5%.