"Después de nosotros", la historia de un fracaso
"Después de nosotros", la historia de un fracaso
Calificación: ****. intérpretes: Berenice Bejo, Cédric Kahn, Marthe Kelle y Catherine Salée. Dirección: Joachim Lafosse. Género: drama. Salas: Cines del Centro y Showcase.
El argumento es bien terrenal y universal. Una pareja se está separando, pero momentáneamente sigue viviendo bajo el mismo techo, con sus dos hijas, porque él no tiene los medios para pagarse un alquiler. Parece una historia argentina, pero no, llega de Bélgica. Viven en una casa que ella -Marie- pagó y que él -Boris- refaccionó. A partir de esta situación, se desarrolla una película llena de tensión e incomodidad, siempre al borde del descontrol emocional, de la situación límite, pero contenida a tiempo, es decir un filme que nos remite al recuerdo de las películas de Ingmar Bergman, sobre todo a aquella "Escenas de la vida conyugal". Con las muy buenas actuaciones de Berenice Bejo y Cédric Kahn, la pareja enfrenta no sólo el conflicto sobre cómo se repartirán la casa donde aún conviven sino que emerge una historia entre líneas de conflicto de clases, además del amor de 15 años de una pareja convertido en desamor. Obviamente, con estos ingredientes el clima del filme es agobiante. Encima, el relato es puro presente entre las cuatro paredes de la casa, no hay registros del pasado ni explicación alguna del motivo de la separación. Todo se centra en un cara a cara de la (ex) pareja, en un drama cerrado y sin desbordes (tan lejos de por ejemplo "La guerra de los Roses") pero que logra mantener el interés hasta el final. Y, hay que admitirlo, con el hombre –Boris- como la víctima de la circunstancia.
Por José Cavazza
"La larga noche de Francisco Sanctis", un día muy particular
Calificación: ***. Intérpretes: Diego Velázques, Laura Paredes y Valeria Lois. Dirección: Francisco Márquez y Andrea Testa. Género: drama. Salas: Del Centro, Showcase y Village.
"La larga noche de Francisco Sanctis" se diferencia de otros filmes que abordan la dictadura por hacerlo desde la perspectiva íntima del personaje protagónico. Basada en una novela de Humberto Costantini, el filme narra la historia de un hombre obligado a enfrentarse con su propio temor. Los directores Andrea Testa y Francisco Márquez reconstruyen minuciosamente la época y abordan el tema de manera indirecta. Francisco es un empleado de una empresa mayorista cuya mayor preocupación es obtener un ascenso siempre postergado.
Mientras vive su vida apacible y rutinaria junto a su mujer y sus dos hijos, un día recibe una llamada telefónica de una antigua compañera de facultad que lo pone en la encrucijada de seguir en su zona de confort o "hacer algo" en sintonía con su antigua militancia, y ese "algo" es la posibilidad de salvar dos vidas. La película transcurre en esa única noche del título, y al estilo de "Después de hora", de Scorsese, y en, menor medida, de "Noche en la Tierra", de Jarmusch, su protagonista puede salir transformado.
Los directores, que participaroncon el filme en la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes, eligieron no mostrar de forma directa las razones del temor y prefirieron representar lo ominoso con cámara en mano, persiguiendo el ruido de pasos en la oscuridad y una única referencia a la presencia militar con dos soldados que aparecen fuera de foco en una breve escena, además de planos cortos sobre un hombre que debe decidir si atender o no a su conciencia.
Por Rodolfo Bella
"Como una novia sin sexo", algo más que amigos
Calificación: ***. Intérpretes: Javier De Pietro, Agustín Pardella, Marcos Ribas y Luana Pascual. Dirección: Lucas Santa Ana. Género: Drama. Salas: Monumental, Showcase.
Hablar en 2016 de elecciones sexuales parece un tema que atrasa. Por eso Lucas Santa Ana, para su primer largometraje de ficción, decidió ambientar "Como una novia sin sexo" en 1996. No es antojadiza la determinación de anclar esta historia veinte años atrás, era otro el mundo, no hay duda. Y también lo era para estos tres amigos, que se van a un camping de Villa Gesell para pasar unos días de vacaciones, sin supuestamente otra motivación que pasarla bien, tomar sol, ir al mar, jugar a la pelota y nada más. Los tres tienen un secreto que prefieren no revelar. Uno escapó de ver morir a su abuelo y los otros dos sienten un deseo mutuo, que va más allá de la amistad. En una situación que podría ser fácilmente adaptada a una puesta teatral, esta es una película de vínculos, que se quiebran aún más cuando aparece la cuarta en discordia, una joven sexy y liberal que le gusta decir las cosas por su nombre y encarar a quien tenga ganas, aunque ni recuerde su nombre. En esa telaraña quedarán expuestas la falta de códigos de la amistad, la homosexualidad reprimida, la libertad sexual, los miedos a salir del closet, el amor y, casi como un tema aleatorio pero no menos importante, el ocio de vacaciones como disparador de sensibilidades que no por estar escondidas son menos reales. "Como una novia sin sexo" remite a una frase en la que uno de los personajes realza el valor de un buen amigo, al que uno lo quiere tanto como a una novia, pero sin sexo. El guiño del título es que hay veces en que las metáforas, ante la evidencia del deseo, se caen a pedazos.
Por Pedro Squillaci