"Los siete magníficos"
"Los siete magníficos"
Calificación: ****. Intérpretes: Denzel Washington, Chris Pratt, Ethan Hawke, Vincent D'Onofrio, Byung-hun Lee, Manuel Garcia-Rulfo y Martin Sensmeier. Dirección: Antoine Fuqua. Salas: Hoyts, Monumental, Showcase y Village.
Del Japón del siglo XVI al Oeste estadounidense del siglo XIX. De samurais a pistoleros y estafadores buscavidas. De la mesura del haiku al rock. Las diferencias parecían insalvables, pero Hollywood lo hizo posible. No solo una, sino dos veces. "Los siete magníficos", la versión de Antoine Fuqua estrenada el jueves -remake de un clásico de 1960 de John Sturges, y ese a su vez remake de "Los siete samurais", una película de Akira Kurosawa de 1957-, se mantiene fiel a su antecedente estadounidense de gran entretenimiento, excelentes actuaciones (Vincent D'Onofrio, sobresaliente), una trama conocida pero que visualiza una sociedad multiétnica que ya era una realidad en Estados Unidos, y la infalible presencia del héroe.
Se trata de la historia del villano que acosa a un pueblo de granjeros indefensos para comprarles su tierra a precio vil -es eso o la muerte- hasta que llegan los siete del título y lo enfrentan. Fuqua rinde tributo, por momentos con gracia y humor, a imágenes icónicas del western, como el ingreso espectacular a un bar, la llegada al pueblo de un desconocido que promete traer problemas, o el duelo en medio de la calle. También sugiere historias personales que justificarían la transformación de los pistoleros en héroes y apela a la nobleza sin solemnidad, en dos horas de acción sostenida y con el rigor formal del los clásicos del género.
Rodolfo Bella / Escenario
"El muerto cuenta su historia"
Calificación: ***. Intérpretes: Diego Gentile, Emilia Attias, Viviana Saccone, Lautaro Delgado y Damián Dreizik. Dirección: Fabián Forte. Género: Thriller. Salas: Hoyts, Monumental, Showcase y Village.
Feminismo, el combate al machismo; una hermandad de mujeres que se propone cambiar el mundo en base a la devoción a una deidad celta, pero antes, creará un ejército de hombres zombies encargados de reclutar a más congéneres para la causa. "El muerto cuenta su historia" es una fábula feminista, con una dosis de ironía al final, con las buenas intenciones del director Fabián Forte por reivindicar el lugar que históricamente se negó a las mujeres.
Diego Gentile interpreta uno de esos maridos de ficción arquetípicos y con doble vida: esposo y padre amable en su casa, y mujeriego, machista y maltratador en su trabajo. Cuando cae en las redes de la secta secreta a través de su socio, comienza un proceso de transformación que aporta parte del ingenio de esta película, una propuesta original para el cine argentino.
Un elenco de buenas actrices cumple los roles de las vengadoras, con Viviana Saccone y Emilia Attias al frente. Forte decidió encarar el tema acentuando el humor negro y con un gore estilizado, al tiempo que la narración avanza a golpe de la perseverancia de ese ejército de la noche que decidió hacer justicia.
Rodolfo Bella / Escenario
"El hombre que conocía el infinito"
Calificación: ***. Intérpretes: Jeremy Irons, Dev Patel, Toby Jones, Jeremy Northam y Stephen Fry. Dirección: Matt Brown. Género: Biográfico. Salas: Del Centro, Monumental, Hoyts, Village, Showcase.
El género biopic dejó de ser novedad hace tiempo. Tanto es así que en los Oscar 2015, por citar apenas un ejemplo, cuatro de las ocho nominadas a mejor película fueron biográficas: “El código enigma”, “La teoría del todo”, “Selma” y “El francotirador”. En “El hombre que conocía el infinito”, el director Matt Brown hurgó sobre la vida de Srinivasa Ramanujan, un genio de las matemáticas, de origen indio, cuya particularidad era resolver grandes problemas aritméticos con más intuición y guiños religiosos que pruebas ortodoxas. A Matt Brown le faltó pulso cinematográfico para darle a esta trama mayor intensidad y emoción. Se notó mucho que es su ópera prima, sobre todo porque eligió un registro narrativo demasiado convencional, al que le faltó una dinámica más ágil, sobre todo en la primera mitad de la película, algo soporífera. Lo que salva al filme es la profundidad actoral de los protagonistas. Dev Patel, aquel que se hizo conocido por su labor en “¿Quién quiere ser millonario?” y “La vida de Pi”, conmueve con su Ramajuan idealista, tormentoso y enamorado. Y como coequiper está la calidad habitual de Jeremy Irons, quien al componer al profesor Hardy demuestra otra vez que a la hora de transmitir emociones menos es más, en sintonía con la estética matemática del filme. Hardy recibirá a Ramajuan en la Universidad de Cambridge y fogoneará sus métodos matemáticos pese a la resistencia del establishment educativo. La película intenta hacer foco en ese vínculo, en el que a partir de la misma pasión nace una atracción mutua, que en el caso de Hardy roza el amor platónico. El filme corona el buen mensaje de lo válido que es luchar por lo que uno ama, aunque siempre haya que navegar contra la corriente.
Pedro Squillaci / Escenario