Hace 40 años, Cacho Deicas dejó la banda y se convirtió en el cantante de Los Tekilas. Marcos Camino probó a tres cantantes para reemplazarlo, pero ninguno lo convenció. Qué pasó entre ellos y cómo se reconciliaron
Por Nachi Saieg
Cacho Deicas es un ícono de la cumbia santafesina y su voz le dio una impronta única a Los Palmeras durante décadas. La noticia de que sufrió un ACV preocupó a miles de argentinos, que siguieron de cerca su estado de salud y le enviaron mensajes de apoyo. Esto lo obligó a alejarse de la música por un tiempo -fue reemplazado por Pablo López- pero lo que muchos no saben es que no es la primera vez que la banda sale a los escenarios sin su presencia.
La polémica que desató Marcos Camino -al revelar que la familia del cantante no les permitía estar en contacto- puso a la banda en el ojo de la tormenta y algunos memoriosos recordaron un hecho poco conocido y contado por sus propios protagonistas: la vez que Deicas se fue por nueve meses.
Como ya se sabe, la historia de los próceres de la cumbia santafesina comenzó en 1972 bajo el nombre de Sexteto Palmeras. El primer intérprete fue Czeslav "Yuli" Popowicz, un músico de familia italiana que ya llevaba una década de carrera. Rubén Deicas tomó la posta rápidamente en un momento de crecimiento de popularidad y marcó un contraste muy fuerte con el estilo de su antecesor. Según recordó en uno de sus últimos reportajes, la diferencia "era como el día y la noche".
Si bien el público no terminaba de aceptarlo, finalmente logró adueñarse del micrófono luego del estreno del álbum "Nadie quede sin bailar". Cacho le atribuyó la consagración al tema "Esa", el último de la lista. "Ahí pude entrar en la gente", aseguró en varias ocasiones. Pero esa sensación duró poco.
Corría el año 1984 cuando las discusiones entre Deicas y Camino, quien siempre fue el líder de la banda, iban escalando cada vez más. Quienes convivían con la banda recuerdan que las peleas eran frecuentes y provocaron la salida del cantante. Nadie se arriesga a confirmar si Cacho dio el portazo o si fue el acordeonista el que le pidió que dé un paso al costado. Lo cierto es que existió una ruptura y cada uno siguió por su lado.
Ramiro Ocanto, asesor y productor musical, fue contemporáneo de las bandas santafesinas de la época. Testigo de la movida de la cumbia, recordó en diálogo con La Capital cómo fueron esos nueve meses que Deicas se fue de Los Palmeras.
Mientras la banda seguía tocando y buscaba, sin suerte, reemplazar a su vocalista, Deicas tejía su propio destino. Cacho volvió a repartir mercadería en su camioneta, como hacía antes de incorporarse a Los Palmeras, cuando fue a realizar una entrega a un comercio al lado de la casa de Julio Maidana, director de Los Tekilas. El conjunto musical recién empezaba y estaba buscando alguien para que fuera la voz principal.
Ocanto narró que fue la mujer de Maidana la que advirtió la feliz coincidencia y le comentó a su marido que Deicas podría ser la llave para el éxito de Los Tekilas. En esa época "Cacho ya era Cacho" y el hombre no tenía fe de poder tentarlo. Pero se equivocaba: se reunió con el cantante, llegaron a un acuerdo y le dio paso a la creación de uno de los discos más emblemáticos de la cumbia santafesina.
"Cumbia yo te canto", fue el título del álbum al que Deicas le puso voz. "Salías de la iglesia", "Amor de millonario", "Niña que estás a mi lado", "Cargado de fantasías", fueron algunos de los títulos de las 12 canciones que se ganaron el corazón de la gente y no paraban de sonar en los bailes.
Al mismo tiempo, Los Palmeras intentaban rearmarse sin mucho éxito. Camino lograba dar en la tecla y cuenta la leyenda que llegó a probar varios vocalistas en una noche. Es habitual que las bandas realicen varios shows por noche y los iba rotando para ver quién rendía mejor arriba del escenario.
Fueron tres los cantantes que intentaron ponerse en el traje de Deicas: Jorge Acosta - que venía de la banda "Los soles tropicales -, Sergio Mirón - cantante de lo que después fue "Los Kilates" - y el mismísimo Sergio Torres.
Fue Camino quien buscó a Deicas para que volviera a la banda. Lo buscó una y otra vez, le insistió para que regresara y finalmente llegaron a un acuerdo. Algunos dicen que le regaló un auto, otros comentan que Cacho recibió un departamento. Las versiones son muchas. Lo cierto es que desde ese momento comparten la sociedad de Los Palmeras - 60% Camino y 40% Deicas - y fueron forjando una amistad que lleva más de cinco décadas.
Ocanto aseguró que ni los propios integrantes del conjunto pensaban que iban a lograr lo que lograron y consideró que fue posible gracias al trabajo incansable y el profesionalismo con que se tomaron las cosas. "Son los número uno también por el sonido, la vestimenta, la responsabilidad. Este éxito no es casual", argumentó y mencionó que "Marcos es la cabeza de todo esto".
Desde esos nueve meses de distancia, Cacho no abandonó nunca más los escenarios junto a Los Palmeras. Excepto por problemas de salud, como en este verano, le siguió poniendo el cuerpo y la voz. Cacho ya es sinónimo de cumbia y todos esperan que pronto vuelva a hacer bailar a su gente.
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