El actor chileno
Benjamín Vicuña estuvo en el programa "Debo decir" y se definió allí como "un hombre curtido por la vida". Junto a Gabriel Rolón presentó la película "Los padecientes". Habló de La
China Suárez, de sus hijos, de la muerte de la pequeña Blanca, y de la situación social en Argentina.
Luis Novaresio lo consultó acerca de cómo ve al país. "Tengo la perspectiva de ser extranjero y ver las cosas con un poco de distancia. son cuestiones complejas porque a la hora de opinar hay que ser cuidadoso, cualquier cosa que se dice genera un debate, una grieta".
"Argentina es un país maravilloso. Es triste ver que no se avance por las rencillas, por este dolor, por la mala praxis de la política, por el ego de algunas personas", describió.
Vicuña calificó la violencia, "los linchamientos" como un retroceso y también los cuidados al opinar. "Es claramente una involución, un retroceso cívico, no poder opinar es también un retroceso. Vengo de un país con una dictadura feroz y fui de los primeros que me saqué esa mochila y dije 'bueno, podemos opinar sobre cuestiones básicas de
derechos humanos, de sentido común".
"Y en ese sentido acá en Argentina, creo que hay un retroceso porque se están privando de opinar, porque te puedes politizar, porque te pueden mandar para un lado, para el otro, creo que eso es triste", agregó.
"Tomé un curso acelerado en la vida", dijo el artista, pareja de la China Suárez, aunque a continuación aclaró que el curso "lo tomó" a él y lo "sopapeó".
Resumen del programa "Debo decir"
El actor explicó que, en estos casos, después de la rabia inicial llega "la resignación y no queda mucho espacio para la rabia, uno tiene que abrazar la vida".
Vicuña, quien perdió a Blanca -hija que tuvo con Pampita- dijo que le aconsejaría a las personas que están atravesando un duelo que escuchen a otro, que no se encierren y que "no caigan en un gesto egoísta de creer que son los únicos que sufren".
"El amor sana e ilumina todo", concluyó.