La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió a la Casa Rosada que “las personas con discapacidad no pueden esperar”, en un comunicado en el que criticó al gobierno de Javier Milei por la falta de fondos para hacerle frente a esa problemática.
La Conferencia Episcopal Argentina cuestionó la falta de fondos para personas con discapacidad. Sorpresa frente al “desconocimiento y desinterés” manifestado por la gestión libertaria
Foto: Archivo / La Capital.
Marcelo Colombo, presidente de la comisión ejecutiva de la CEA, llamó a la reflexión a los integrantes del Ejecutivo nacional.
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió a la Casa Rosada que “las personas con discapacidad no pueden esperar”, en un comunicado en el que criticó al gobierno de Javier Milei por la falta de fondos para hacerle frente a esa problemática.
“Una dignidad infinita, que se fundamenta inalienablemente en su propio ser, le corresponde a cada persona humana, más allá de toda circunstancia y en cualquier estado o situación en que se encuentre”, sostuvo el comunicado de la Iglesia, que lleva las firmas de monseñor Marcelo Colombo, presidente de la comisión ejecutiva de la CEA, del cardenal Angel Rossi (vicepresidente 1º), monseñor César Fernández (vicepresidente 2º) y monseñor Raúl Pizarro, secretario general.
“Como discípulos de Jesús y su Evangelio seguimos convencidos de que es necesario que «rescatemos» a la persona y su dignidad, que la pongamos en el centro de nuestros intereses, de nuestros servicios y proyectos”, continuó el mensaje de la Conferencia.
Según los prelados, en el contexto actual de la Argentina el acceso a servicios esenciales como la salud, la rehabilitación, la educación, el acompañamiento profesional y los apoyos necesarios para la vida cotidiana de las personas con discapacidad se volvieron “inciertos y limitados”.
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“El esfuerzo cotidiano de las familias que los acompañan muchas veces se realiza en soledad, sin el reconocimiento suficiente de la sociedad ni el apoyo adecuado del Estado. Esa realidad no es una cifra estadística: tiene nombres, rostros e historias. Son niños, jóvenes y adultos que ven cercenadas sus posibilidades de desarrollo, participación e inclusión plena”, enfatizó la Iglesia.
Asimismo, la comisión ejecutiva de la CEA manifestó su sorpresa frente al “desconocimiento y desinterés hacia la realidad de la discapacidad” y, al respecto, indicó que la problemática “debería ser una prioridad ineludible de toda política pública”.
En esa línea, el texto instó a quienes, desde el Estado nacional, tienen la responsabilidad de “apoyar con los recursos necesarios para que el área de Discapacidad pueda cumplir con eficacia su tarea”.
“El cuidado de las personas con discapacidad no puede ser postergado ni subordinado a otras urgencias: es un deber ético, una exigencia de justicia y un acto de humanidad”, añadieron los obispos.
Al respecto, hicieron un llamado a evitar “actitudes y expresiones que lastiman, esos lenguajes despreciativos, por momentos no exentos de crueldad, que atentan seriamente contra aquella unidad que tanto necesitamos como pueblo, para ponernos la Patria al hombro, para salir adelante”.
La Iglesia también quedó a disposición del gobierno y concluyó invocando a la Virgen de Luján para que ayude a “salir al encuentro de los que sufren para comprometernos con ellos”.
El comunicado de la CEA fue difundido casi una semana después del duro mensaje del arzobispo de la ciudad de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, durante el tradicional tedeum por el 25 de Mayo en la catedral metropolitana, frente al propio Milei.
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En ese contexto, pidió por “tantos hermanos que la están pasando mal”, al tiempo que renovó su reclamo por la situación de los jubilados y convocó al diálogo de toda la sociedad. “No se construye desde la guerra entre nosotros”, alertó el prelado.
Por Lucas Ameriso
Por Nicolás Maggi