Desde que se desmadró el conflicto entre bandas antagónicas en el corazón de barrio Tablada, la familia Arduvino está atravesada por la muerte y la violencia. Muestra de ello es el crimen de Josué Isaías Arduvino (22 años), a quien asesinaron el viernes por la noche cuando se encontraba con amigos a metros de donde mataron a su hermano Néstor Andrés en junio del año pasado. Los dos murieron casi en el mismo lugar, cerca de la esquina de Virasoro y Berutti.
De acuerdo a la reconstrucción de este último homicidio, que investiga el fiscal de Homicidios Patricio Saldutti, Josué, alias “Polli”, se encontraba con amigos en esa esquina cuando advirtió que dos hombres a bordo de una moto se acercaban a los tiros. En eso atinó a correr para guarecerse dentro de su casa, a una cuadra de distancia, pero en el trayecto sufrió al menos ocho impacto de bala que acabaron con su vida pese al traslado hacia el Hospital Provincial, donde confirmaron su muerte una hora después.
De acuerdo a lo que se pudo establecer por testigos, los hechos se dieron de la siguiente manera: al verse acorralado por los gatilleros en esa ochava, “Polli” escapó por Berutti hacia Rueda. La moto en la que se desplazaban los agresores le dispararon varias veces y fue así que cayó malherido a metros de la esquina. Muestra de eso es que los peritos policiales colectaron muestras de manchas de sangre halladas en una gasa y secuestraron un cargador con 13 cartuchos calibre 9mm, 14 vainas servidas del mismo calibre y cinco plomos deformados.
“Estábamos escuchando el partido de Rosario Central y de pronto empezaron los tiros; habrán sido ocho o diez tiros. Cuando los vecinos salimos a la calle pensamos que el herido era otro pibe que vive a una cuadra de acá, pero no, era el Polli. Era un buen chico, trabajador y saludaba a los vecinos. En esta zona de Tablada nos conocemos todos. Pobre familia, ya mataron a varios”, contó una vecina. Apenas supieron lo sucedido, los familiares llevaron a Polli al Provincial, donde los médicos que atendieron a la víctima le diagnosticaron heridas de arma de fuego en abdomen y la pierna izquierda como causa de muerte, razón por la que se le realizó un dermotest al cuerpo.
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Este sábado por la tarde, los familiares de Josué “Polli” Arduvino estaban desconsolados en la puerta de la casa familiar de Tablada. “No era para él, te lo puedo asegurar. Él estaba intentando entrar a trabajar a la empresa “Monte Helado”, ya había estado ahí. Tenía una hija de dos años y lo único que quería era salir adelante. No sé si era para uno de los tres que estaban charlando con él o qué pasó. Este año queríamos poner una chapería, por que él también sabía de motores y pintura”, dijo uno de sus hermanos.
“No tenía un solo antecedente de nada, era un pibe sano que estaba esperando que un tío le diera un trabajo. Salió a sacar la basura y cuando llegó al contenedor había ahí unos pibes y se quedó hablando con tres y pasaron dos muchachos en una moto a los tiros, pero él no tenía nada que ver y salió corriendo. Tampoco tiene que ver con ninguna venganza hacía la familia ni nada”, contó una mujer que a la vez reclamó: “No sé por qué en los diarios ponen el nombre de nuestra familia; tendrían que pedir autorización a ver si queremos que pongan el nombre. Por que ahora empiezan los comentarios de internet y dicen cosas horribles”, reclamó.
Para su hermano “Polli era motivador del barrio, el que los llevaba a jugar a la pelota, el que insistía con meterse en los campeonatos. Mi hermano era un chico de trabajo y esto no tiene nada que ver con otro Arduvino que está preso, son dos cosas distintas. Los que lo mataron o se confundieron o era una bronca con la mala junta pero él no se merecía esto ”, dijo.
Signados por la violencia extrema
A pesar de la propia familia el apellido Arduvino tiene una larga historia en las crónicas policiales. En 2010 fue asesinado Emiliano Arduvino, de 15 años. Fue el 16 de marzo de 2010 en la entrada de un pasillo ubicado en pasaje Médici al 4600, en inmediaciones de Ayacucho y Uriburu. Una mujer y su pareja fueron culpados de aquel crimen.
En tanto, el 8 de abril de 2012 y en un confuso episodio, Andrés “El Lepe” Arduvino, un hombre con antecedentes por robo, fue apuñalado en el estudio jurídico del abogado Fabián Casarini. El caso tuvo idas y venidas y finalmente la Justicia determinó que el letrado se defendió de una agresión de Arduvino.
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En este caso puntual la madre de Andrés, Daniela, dijo el sábado a La Capital que aún sufre porque a su hijo “lo mataron como a un perro y la Justicia liberó al abogado".
"El Lepe estaba en rehabilitación; yo me la tuve que comer por que soy pobre y peleaba contra leones”, lamentó.
El año pasado, en junio de 2022, Néstor Andrés Arduvino (18 años) fue asesinado en un tiroteo perpetrado en un playón que se usa también como canchita de fútbol de Virasoro y Berutti, una esquina signada para esa familia. Ese día Juan Arduvino estaba con su hermano y otras treinta personas cuando alrededor de las 17.30 pasó una moto Honda Wave y el acompañante comenzó a disparar “al bulto”.
“Mi hermano era un pibe querido en el barrio. Una persona que buscaba trabajar y estudiar para ser mejor. Nosotros llevamos un apellido que tiempo atrás estuvo mucho en los diarios. Nos juzgan por el apellido y nada que ver”, dijo Juan en ese momento.
Ahora a Juan le mataron a otro hermano, Josué Isaías, Polli para las calles de Tablada. “Somos una familia atravesada por la muerte, no sabemos por qué”, dijo Juan el sábado por la tarde antes de ingresar a su casa y compartir el dolor y ese incomprendido destino de balas junto a los hermanos que quedan.