El 24 de mayo de 2019 el albañil Cristian Martín Gómez descargaba materiales de construcción frente a su casa de Villa Gobernador Gálvez en compañía de su hijo y su cuñado. De pronto se acercaron tres jóvenes para robarle su Fiat Palio y con el fin de lograr su objetivo hirieron con un disparo a Silvio G. y mataron a Gómez con otro. Los acusados como autores materiales fueron Rodrigo Cresta, de 21 años, y Leandro Gutiérrez, de 23; en tanto como instigadores del hecho fueron imputados oportunamente Miqueas Gómez, de 28 años; y Héctor Daniel “Gordo Dany” Noguera, de 31. Este jueves, tras un juicio oral y público, los cuatro fueron condenados por aquel homicidio que tenía como finalidad apoderarse de un auto para ir a atacar un búnker de ventas de drogas perteneciente a Ariel “Jerry” Gaeta, un rival del “Gordo Dany” que fue ultimado a tiros un año más tarde.
Los jueces Román Lanzón, Gustavo Pérez de Urrechu y Gerardo Vico Gimena fueron los encargados de dictar la sentencia que impuso a Cresta y Gutiérrez la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio calificado críminis causa (matar para ocultar otro delito, en este caso el robo del auto de la víctima) y por la tentativa de homicidio del cuñado de Gómez. En tanto, al Gordo Dany, que se encuentra detenido por otra muerte, y a Miqueas González, les impusieron penas de 15 años de cárcel. Además, a éste último le unificaron la pena con una sentencia federal por narcotráfico que la elevó a 20 años de prisión.
Los asesinos, según quedó demostrado en el juicio, salieron a buscar un auto por orden del Gordo Dany, quien estaba en contacto telefónico con González, por entonces preso en el penal de Piñero. El objetivo era atacar a tiros un búnker de Jerry Gaeta, histórico rival de Noguera en la venta de drogas Villa Gobernador Gálvez. Y aunque aquel día el crimen de Jerry no se concretó, sí lo hicieron 15 meses más tarde, cuando un grupo comando acribilló el 4 de agosto de 2020 a Jerry en su casa de barrio Matheu, hecho por el cual Noguera está detenido.
En escuchas al Gordo Dany ventiladas en las audiencias judiciales se detectó que aquel 24 de mayo de 2019 los homicidas buscaban “una bici de cuatro ruedas” para salir a la caza de Gaeta. El plan fue ejecutado con torpeza, salió mal y terminó en el crimen del albañil.
Tras el asesinato, dijeron fuentes judiciales, los homicidas recibieron “directivas telefónicas a fin de ayudarlos a eludir las investigaciones, no ser capturados e indicarles el lugar donde debían ocultarse y entregar el auto robado”. En ese marco, la madrugada del 25 de mayo se dio una persecución de agentes de la TOE al vehículo sustraído tras avistarlo en Francia y Uriburu, aunque poco después los agresores escaparon abandonando el Fiat de la víctima en Uriburu y Circunvalación.
Durante la investigación, la fiscal Marisol Fabbro detectó que el homicidio estaba conectado con los planes de una organización criminal. Descubrió que la búsqueda de Jerry, acribillado el 4 de agosto del 2020, comenzó tan manchada de sangre como terminó. Gaeta, de 49 años, supo ser una figura de peso en la venta de drogas en Villa Gobernador Gálvez. Estaba sentado a la mesa de una casa de pasillo de Savio 2568, en la zona sur de la ciudad, cuando irrumpió un grupo con al menos cuatro armas distintas y lo mató. También asesinaron a su yerno, Fernando Gaspar Rodríguez, de 27 años. Por ese doble homicidio hay cinco acusados, entre ellos el Gordo Dany, su histórico rival, también como instigador del trágico episodio juzgado esta semana.
El objetivo era terminar con la vida de Gaeta y para eso Noguera y Gómez necesitaban un auto. Las Fiscales Marisol Fabbro y Mariángeles Lagar, demostraron durante las distintas audiencias que el 24 de Mayo del 2019 luego del mediodía, Miqueas González se encontraba detenido en la cárcel de Piñero y Hector Noguera estaba en su casa de 17 de Octubre 900 de Villa Gobernador Gálvez y que coordinaron mediante llamados telefónicos y mensajes un plan criminal para matar a Jerry Gaeta
>> Leer más: Quién era "Jerry", acribillado a tiros en su casa de pasillo de barrio Matheu
Para la búsqueda del auto con el que se iba a realizar el ataque a Gaeta, Miqueas Gómez pactó telefónicamente con los jóvenes el precio de 9 o 10 mil pesos aproximadamente para comprarles el vehículo una vez que logren sustraerlo, a dividirse en tres partes iguales. Luego el auto fue abandonado durante una persecución policial.
Actualmente Noguera está acusado de ser instigador del robo del auto y la muerte de su dueño, por lo cual ahora recibió condena, y está acusado por el asesinato a balazos de Gaeta ocurrido en agosto de 2020. Jerry, por entonces, estaba sindicado como jefe de una banda narco de Villa Gobernador Gálvez ligada a Luis “Pollo” Bassi, uno de sus socios; y Cepe Benítez, preso y acusado por el asesinato de Rodrigo Carlos Sánchez, a quien le atribuían ser jefe de los sicarios de la banda de Esteban Lindor Alvarado, crimen ejecutado en marzo de 2020.
El 4 de agosto de 2020 Gaeta fue acribillado a balazos a unos diez kilómetros del último domicilio que se le conocía, muy lejos de los territorios que mantenía en disputa con el Gordo Dany, su contrincante. Ese día dos hombres bajaron de un auto gris, ingresaron al pasillo donde residía y al verlo le descargaron entre 10 y 12 balazos. Junto a él cayó fulminado su yerno, Fernando Gaspar Rodríguez, de 27 años.
>> Leer más: Imputaron a los autores del crimen de Ariel "Jerry" Gaeta
Los vecinos del pasillo de pasaje Savio al 2500 (Ovidio Lagos al 5000), en el barrio Matheu, los vieron ingresar armados e ir directamente sobre dos hombres que estaban allí. “Se escucharon como 10 o 12 balazos. La verdad es que no sé decirte si fue una ráfaga o no. Para mí fue ¡pla, pla, pla! Uno detrás del otro”, explicó una vecina por entonces. “Fue una ráfaga de «metra» (como se reconoce a la pistola ametralladora FMK3) en la calle, los liquidaron sin darle tiempo a nada”, contó otro vecino para la crónica de ese día.
Los últimos tres años de su vida Jerry fue un importante actor del narcotráfico en Villa Gobernador Gálvez regenteando puntos de venta y sosteniendo su territorio a sangre y fuego. Un hombre que supo hacer equilibrio y sobrevivir a los años de plomo de la última década y que le dejaron alguna herida de bala en su cuerpo. Sobre su cabeza pesaba un pedido de captura del 19 de junio de 2017 emitida por el juez federal Marcelo Bailaque, en un desprendimiento del expediente en el que fueron condenados Yanina Alvarado y su esposo, Fabricio Lorincz, la hermana y el cuñado de Esteban Lindor Alvarado. Jerry mantuvo un duro enfrentamiento por el control de las calles con el gordo Dany, brazo armado de Los Monos en territorio villagalvense.