Dos hermanos fueron asesinados a balazos en el interior de la casa donde vivían en la zona sur de Rosario. Fuentes policiales indicaron a La Capital que las víctimas fueron un hombre y una mujer, jóvenes de entre 20 y 25 años, que fueron hallados sin vida esta mañana por la propia madre.
El hecho ocurrió en Castro Barros 5566, en la zona sur de Rosario, y las víctimas fueron identificadas como Agustina y Javier Ponisio. El doble asesinato causó conmoción en esa cuadra del barrio Saladillo. Es que la familia de las víctimas es muy conocida y apreciada por los vecinos.
Las primeras informaciones indicaban que este hecho no se habría desencadenado en ocasión de un robo y todas las sospechas estaban sobre el ex novio de la chica como presunto autor de los disparos.
La versión más fuerte que circulaba en el lugar era que el trágico episodio comenzó con una pelea de pareja y que derivó en homicidio cuando Javier salió en defensa de su hermana.
Esa hipótesis deberá ser confirmada por la investigación que recién se inicia con la intervención del fiscal de Homicidios Dolosos Florentino Malaponte.
"Esto sucedió a las 9.30, porque a las ocho y media yo estaba barriendo la vereda y no vi nada raro. Estaba todo normal", contó al móvil de La Ocho una vecina de la cuadra muy conmocionada por lo ocurrido. La testigo contó que fue la madre de los hermanos la que descubrió el macabro cuadro.
"Ella llegaba del gimnasio. Abrió la puerta y se encontró con los dos chicos muertos. Es terrible lo que pasó. Esta familia hace más de 30 años que vive aquí. Son vecinos intachables. Los chicos eran adoptados. Yo ví cuando la mamá los trajo de bebé. Los adoptó a los dos y los crió con tanto amor. La nena era amorosa. Trabajaba en el Grupo Oroño. El chico se dedicaba a cuestiones del campo que tenían los padres", contó la vecina.
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