Viene de desempeñar un buen rol en Mar del Plata. La yapa fue que marcó su primer gol con la casaca de Central. Pero Miguel Barbieri no se queda saboreando panza arriba la miel del triunfo ante Aldosivi. El zaguero central se plantó e hizo eje en lo que vendrá a corto plazo para el club a nivel deportivo. Fue claro y preciso a la hora de elaborar un concepto sobre los retos que se avecinan ante Universidad Católica de Chile y Gremio de Porto Alegre, por Copa Libertadores, como la final de la Supercopa Argentina ante Boca en Mendoza. "Vamos a ir a ganar los tres partidos", destacó con énfasis y a modo de desafío el defensor.
Todo indica que pasado mañana estará atrincherado en el Gigante junto a Matías Caruzzo en la línea defensiva. El partido contra la Católica está al caer. Será crucial para las aspiraciones auriazules en el plano internacional.
Porque el equipo aún tiene chances matemáticas de pasar a octavos de final de la Libertadores. Claro, no es nada sencillo porque no depende de sí mismo. Se tendría que dar una serie de combinaciones en todo caso.
Pero la clasificación a la Sudamericana podría materializarse si gana las dos citas que tiene. Por eso Barbieri aspira a ganar todo lo que queda en el camino "para no depender de nadie. Y lo vamos a hacer", clamó el zaguero.
"Tenemos la cuenta pendiente de ganar en el Gigante, ya que las dos victorias fueron de visitante. Somos consciente de eso, como también de que lo necesita la gente", deslizó Barbieri plantándose bien firme sobre cuál es el objetivo inmediato a conseguir.
Luego confesó que "el partido por la copa frente a la Católica puede ser un buen puntapié para que los hinchas estén confiados y vayan con esas expectativas a Mendoza para enfrentar a Boca".
El zaguero valoriza los tres desafíos que tienen frente a sus narices. También potencia la mancomunión que debe reinar tanto dentro como fuera de la cancha. "Necesitamos de todos para lo que viene. Porque estamos hablando de partidos de Copa Libertadores y una final, que será con Boca", puntualizó dejando en claro: "Buscaremos ganar como sea todos los partidos".
Después, cuando se lo consultó sobre la pobre producción canalla en lo que va del año, repasó y remarcó con impotencia que de 18 presentaciones sólo pudieron ganar en dos (Argentinos Juniors y Aldosivi).
"Sí, eso fue y es muy duro para nosotros. En ese sentido somos los primeros que sufrimos y los que queremos revertir todo esto. Ganamos algo importante como la Copa Argentina y se habían generado grandes expectativas. Pero nos pasó que no nos salían las cosas. Nos dábamos cuenta de que no podíamos salir a flote. Y eso es duro. Por eso estos tres partidos que restan hay que jugarlos a muerte", acotó.
Barbieri remarcó que ante Aldosivi "hubo una mejoría notoria y ahora hay que agarrarse de eso para encarar lo que vendrá". Lo dijo mirando esencialmente a los encuentros ante la Universidad Católica y Gremio y aseguró que dejarán la vida en el Gigante porque está en juego la Sudamericana.
Sin embargo, la mayor energía está concentrada en la final de la Supercopa Argentina contra Boca, el 2 de mayo en Mendoza. "La venimos esperando desde principios de año y ahora la tenemos muy cerca", expresó el defensor con ganas de salir ya a la cancha.
No obstante, inmediatamente quiso volver en sí y repitió: "Vamos a ir a ganar los tres partidos".
Primer gol en 16 cotejos
La conquista del 2-1 sobre Aldosivi fue la primera de Barbieri con la camiseta auriazul en 16 partidos: 11 por la Superliga, 4 por la Libertadores y el del sábado en la Copa Superliga. El marcador central fue titular en 4 de los 6 partidos bajo el mando de Diego Cocca, ingresó a los 65' por Caruzzo (frente a Libertad) y no estuvo en el choque de ida ante Aldosivi.
Llegan en ganadores
La U. Católica llegará en ganador al cotejo en el Gigante, ya que el sábado venció 2-1 a Palestino y venía de golear 4-0 en su cancha a la U. de Chile, levantando tras el duro 2-3 que recibió por parte de Libertad en la 4ª fecha de la Libertadores. Además, el equipo es el líder del torneo chileno con 22 puntos en 9 fechas.
Para el miércoles, los cruzados no contarán con el argentino Sebastián Sáez, quien sufrió un desgarro en el bíceps femoral derecho, mientras que con contracturas están en duda los volantes César Fuentes y César Pinares, todos titulares y que jugaron el choque de ida ante el canalla en Chile.