Como hace ya tiempo, en Central la sensación es que lo mejor que puede ocurrir es que el telón de la Liga Profesional se baje cuanto antes. De esta forma al canalla no le quedará otra que poner la cabeza en blanco, pensar, reflexionar y juntar fuerzas para lo que vendrá, rearmado del plantel mediante. Pero claro, antes hay pasos por cumplir y uno de ellos es el compromiso que tendrá este jueves por la noche, en Tucumán, ante el encumbrado Atlético, al que sólo le sirve el triunfo en medio de sus aspiraciones de lograr el título. Pero para Central a esta altura no hay equipos más duros que otros, sino que todos lo complican. Por eso, que enfrente esté el decano es solo un dato más. Lo cierto es que contra este Atlético Tucumán el canalla tirará una de sus últimas fichas en busca de un pleno que le dé un poquito de alivio. Eso es lo poco con lo que este Central de Tevez debe conformarse.
Tras siete partidos sin ganar, para Central cualquier cosa es compleja y contra eso deberá luchar también, cuando intente sacarse esa mufa ante el decano que lo persigue a sol y a sombra y que no lo deja respirar tranquilo.
Se sabe que esa racha no es porque sí o producto exclusivamente de la mala suerte, nada de eso. Lo que vive el canalla es porque su fútbol le dio hasta acá o bien Carlos Tevez no dio en la tecla para que el equipo despegue.
Con esa mezquindad futbolística se tendrá que parar este jueves en el José Fierro para ver si consigue algo que hasta acá le resultó un problemón: ganar.
Demasiado lejos quedó aquel 3 de septiembre, cuando en el Gigante este Central de Tevez celebró su última victoria, contra Talleres. Después de eso fueron casi todas pálidas y desazón. Es un paliativo muy pequeño pensar que sólo dos (Argentinos Juniors y Racing) de esos siete partidos fueron derrotas, porque los otros cinco empates también fueron tomados como retrocesos más que como un pasito al frente. Es más, hubo dos (Platense y Defensa y Justicia) de esos encuentros en los que Central jugó un rato largo con uno más y ni siquiera así pudo ganarlos.
Otra vez Tevez se vio obligado a retocar el once por las bajas de Lautaro Blanco y Gino Infantino, pero a esta altura del torneo y viendo cómo responde el equipo con titulares, con algún recambio, con mayoría de chicos, con más o menos experimentados, todo da lo mismo, por lo que no sería extraño que también salga Jhonatan Candia.
Paralelamente a lo futbolístico estará la cuestión institucional (para hoy está prevista la asamblea en la que se conformará la comisión electoral) y parece que no, pero todo va de la mano.
Es que Central necesita orden tanto dentro como fuera de la cancha, pero lo político está arrancando y lo deportivo llegando a su fin en esta temporada, por eso la urgencia está ahora más cerca de la pelota.