Inventó una gran jugada en un partido donde las necesidades y urgencias estaban bien delineadas. Emiliano Vecchio frotó su botín e encendió la lámpara de la ilusión canalla en una cita cargada de adrenalina. El 10 tuvo una noche de diez. No solo clavó un gol reservado solo para mentes creativas sino además terminó siendo, una vez más, determinante en Central. El mismo canalla que se quedó con la llave ante Deportivo Táchira e inscribió su nombre entre los ocho mejores equipos del continente. El representativo de Arroyito sigue alimentando el sueño copero internacional. Continúa latiendo con vida en esta Sudamericana. En gran parte merced a su conductor, su gran capitán.
Vecchio mostró una nueva versión formidable de lo que puede hacer dentro de un campo. La expresión más elocuente data a los 42’. Inició la jugada que él mismo concluyó y desató un vendaval festivo auriazul.
El 10 jugó con la cabeza. Contrarrestó la falta de ritmo físico con ideas claras. Aportó su genialidad en varias dosis. Se movió con las mañas que lo hacía en el potrero de barrio Acindar. Marcó la diferencia con temple y espíritu guerrero.
Durante el primer tiempo se posicionó bien atrás. No fue el tradicional enganche. Fue una combinación de libero y volante central bien recostado en el fondo. El capitán se plantó por izquierda, dejando el rol de salida al Gato Avila.
Pensar que recién reapareció el lunes pasado en Mendoza ante Godoy Cruz tras la supuesta contractura que informó el cuerpo médico. La misma que le costó casi un mes para volver al alto rendimiento. En el suelo cuyano fue de lo mejor del equipo, pese a que se lo vio con una marcha menos. Quizá no aceleró más ante el Tomba para prevenir romperse de nuevo y perderse así una maratón de partidos. Como el de anoche con Táchira. Pero estuvo. Y jugó de diez. Con la diez en la espalda. Con el intelecto deportivo en estado puro. El capitán canalla reguló en pasajes por razones obvias: viene de una lesión muscular y no hizo la pretemporada al mismo ritmo que el resto del pelotón. Así y todo, no dio ventajas a la hora de la verdad. La mayoría de las ocasiones que Central pisó territorio venezolano fue por obra y arte de Vecchio. El mismo crack que metió al equipo de su corazón entre los ocho mejores de la Sudamericana y sigue ilusionando a todo Central con hacer saltar la banca.
El debut. Alejo Veliz ya había ido al banco dos veces y ayer le tocó debutar en primera cuando entró por Marinelli a los 82’. De 17 años, hizo el gol de la reserva ante Godoy Cruz (1-1).
Cinco partidos, tres veces figura canalla y tres goles
De los 8 partidos en esta Copa Sudamericana, Emiliano Vecchio no pudo estar en tres. En el 2-0 de la 2ª fecha ante San Lorenzo (se lo preservó para el clásico), en el 1-1 en Chile con Huachipato por la 3ª (Covid) y en la ida anta Táchira por lesión. Y en los restantes cinco encuentros, el capitán canalla fue desequilibrante. Fue elegido la figura Ovación en la revancha con San Lorenzo (2-1), en el 5-0 ante los chilenos y anoche, y en todos ellos además marcó un gol. Además, según la Conmebol, es el jugador que más situaciones de gol creó de todos los de la copa: 21 con las de ayer.
Síntesis
1 Central: J. P. Romero 6,5; D. Martínez 6, F. Almada A 6, G. Avila A 5,5 y L. Blanco 6; D. Zabala 6, E. Ojeda 6, E. VECCHIO 9 y L. Ferreyra 5,5; A. Marinelli 5 (81’ A. Veliz -) y L. Martínez Dupuy 6 (87’ R. Villagra -).
DT: Cristian González (4-4-2)
0 Dep. Táchira: C. Varela 7; N. Hernández 4, P. Camacho 3, L. Trejo 3 y J. Granados A 3; Y. Chacón 3,5 (62’ E. García A 4), F. Flores 4,5 (62’ J. Colina 4), M. Covea 4,5 y D. Zalzman 3,5 (80’ L. Gómez -); A. Uribe 3 (74’ D. Angarita -) y F. Góndola 3 (45’ P. Greco 4).
DT: Juan D. Tolisano (4-4-2)
Estadio: Gigante de Arroyito
Arbitro: D. Fedorczuk (6)
Expulsados: No hubo
Goles: 42’ Vecchio (C).
A Amonestado
E Expulsado
La figura