Son 25 años los que respaldan la trayectoria de Pelokitos, una innovadora cadena de peluquerías para niños que nació por la inventiva de Federico Fernández, al frente de la marca junto a su hermano Leonardo. La clave estuvo en detectar una oportunidad de negocio al combinar juegos infantiles con cortes de pelo, saliendo a ofrecer un servicio que hasta el momento no existía en la ciudad y tuvo desde sus comienzos una buena recepción por parte de las familias.
Con trece locales, entre propios y gerenciados por externos, los hermanos y socios ahora apuestan a crecer “a lo grande” y es por esto que acaban de relanzar su sistema de franquicias, con el foco puesto en su expansión nacional e internacional. “Con el relanzamiento de la franquicia estamos haciendo una renovación de la marca. Lo que se viene es ‘Pelokitos Flow’, con un concepto más dinámico e interactivo que se va a ver reflejado en los nuevos espacios”, contó al Suplemento Negocios de La Capital, Federico Fernández, anticipando los cambios que se vienen por delante.
Diversión para niños asegurada
Corría el año 1999 cuando Federico, un joven peluquero con ganas de emprender en el sector, notó que no había opciones de peluquerías enfocadas en un público infantil, con juguetes y videojuegos que los entretuvieran mientras les cortaban el pelo. Entonces apostó a abrir un local distinto en Rosario, con propuestas lúdicas para jugar, convirtiendo la visita en una ocasión para divertirse y también en un alivio para los padres que ya no tenían que lidiar con los rechazos de los más pequeños a pasar por las tijeras.
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Interior de la cadena de peluquerías Pelokitos en el shopping Alto Rosario.
Foto: Hector Río / La Capital.
“No había nada del estilo en ese momento, entonces se me ocurre hablar con un arquitecto y plantearle la idea que tenía. La primera peluquería la abrí en calle Italia y Córdoba y con la inauguración de una segunda sucursal en Buenos Aires y 3 de Febrero se sumó mi hermano al proyecto. Pero el cambio grande lo vimos cuando nos plantamos en centros comerciales, arrancamos en el Shopping del Siglo y luego siguieron las aperturas en el Alto Rosario y en el Portal”, contó Fernández.
Tener tiendas en los shoppings les permitió aumentar su visibilidad al público, sobre todo entre las familias que aprovechan estos espacios como salida recreativa. La estrategia no es esperar a que los clientes los busquen sino ir tras ellos a los lugares que eligen para pasar el rato y distenderse, resolviendo el corte de pelo de los más pequeños de forma ágil, pero con una experiencia de entretenimiento asegurada. Y no solo eso, ya que muchas veces los mismos padres aprovechan los servicios de Pelokitos para hacer algún que otro retoque. El corte de pelo básico cuesta $8300 sin importar la edad o el género.
Vale destacar que Pelokitos es un negocio que para poder costear los gastos de estar en espacios como los shoppings requiere de sumar “extras” al ingreso que tienen por los servicios en peluquería. Por eso, hace tiempo que los locales están equipados con distintos juguetes para vender a las familias, con precios accesibles con el objetivo de que tengan buena rotación. Fue a su vez una integración atractiva al momento de franquiciar la marca y salir a ofrecerla a potenciales inversores.
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Desde bebés recién nacidos hasta niños y pre adolescentes eligen cortarse el pelo en los locales que tiene la cadena.
Foto: Hector Río / La Capital.
“Somos una combinación de juguetería con peluquería y así nos presentamos a cada lugar donde buscamos llegar. Antes vendíamos accesorios como shampoos y enjuagues para chicos, pero no era tan redituable. Otra innovación que realizamos es capacitar a nuestros empleados para que aprendan a cortar el pelo en movimiento porque cuando los chicos interaccionan con juguetes o videojuegos se mueven”, indicó Leonardo a Negocios.
Crecer y diversificarse
En la actualidad Pelokitos está compuesta por 60 personas que realizan múltiples tareas, desde peluqueros, hasta encargados de salón y responsables comerciales. Incluso en la dinámica de los hermanos Fernández los roles están divididos, mientras Federico se encarga del marketing y del vínculo con inversores, Leonardo lleva adelante la parte administrativa del negocio. Una dupla que se complementa y resulta efectiva a lo largo de estos años, sobre todo en momentos críticos donde, como todo proyecto, la permanencia peligra y hay que aplicar creatividad para salir a flote.
“Pasamos muchos momentos difíciles como el 2001, la gripe aviar o la pandemia donde las familias lo primero que protegen son a sus hijos entonces nuestra actividad se redujo a cero. Pero pudimos reinventarnos y seguir adelante, por eso tenemos la idea de renovarnos y apostar a un nuevo sistema de franquicias que nos permita crecer en la Argentina, pero también en el exterior, con foco en países como Estados Unidos donde nuestra propuesta es muy original y valorada”, indicó Federico sobre los planes que van a poner en marcha.
El tema franquicias no es nuevo para Pelokitos ya que vienen trabajando hace tiempo con este modelo. La primera abrió sus puertas siete años atrás en San Nicolás y cuentan con tres más en las ciudades de Funes, Santa Fe y en el shopping Paso del Bosque en Rosario. A su vez, incursionaron en Estados Unidos con seis peluquerías en Miami aunque a este mercado llegaron con licencias de marca, un formato distinto al de las franquicias donde sólo ceden su sello y el permiso para usarla pero no aportan el know how. Se trató de un movimiento comercial para asentarse en el país norteamericano y aceitar el negocio para ahora sí, lanzarse definitivamente con franquicias al extranjero.
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Los chicos disfrutan de los videojuegos mientras un peluquero se encarga de su cabello.
Foto: Hector Río / La Capital.
“Para franquiciar en Estados Unidos necesitás dar ciertos pasos, por eso abrimos locales hace unos años, los cuales recién están empezando a generar ganancias y ya funcionan de forma aceitada, lo que nos da la pauta de que estamos en condiciones de arrancar con las franquicias. Este relanzamiento va a ser internacional e implica un cambio total en la identidad comercial y en el equipamiento porque estamos yendo hacia una digitalización completa”, contó Federico.
El precio de la franquicia se ubica entre los u$s 50 mil y los u$s 70 dependiendo los metros cuadrados que tenga el negocio ya que Pelokitos puede adaptarse a un formato de sucursal tradicional, o en espacios “tipo góndola” que son trasladables y se ubican en corredores de shoppings. Además de pasar a ser “Pelokitos Flow”, otra de las novedades es que incorporarán mesas interactivas para que los chicos jueguen de forma grupal, un plus que será de gran atracción.
“Tenemos una marca consolidada y aparecen muchas oportunidades a donde podemos llevar este formato. Se nos presentó la chance de crecer en Perú, Uruguay, Chile y Brasil a través de la cadena Cencosud, porque los centros comerciales en otros países no cuentan con peluquerías para chicos, por eso quieren sumar este servicio para atraer a las familias. Sabemos que generamos valor, estamos preparados para expandirnos y que más personas conozcan nuestra propuesta”, aseguraron los hermanos Fernández.
Dar el salto a los panificados
Los socios decidieron apostar a un nuevo rubro que no solo ven como un negocio potencial, sino como la posibilidad de incursionar en un nicho que les resulta atractivo: la panadería. Luego de uno de sus tantos viajes a Estados Unidos conocieron una franquicia de churros que les gustó y decidieron replicar el modelo que se centra en ofrecer este clásico con variedad de rellenos como chocolate, dulce de leche, crema pastelera o nutella. Además, comercializarán otros panificados congelados como medialunas, bizcochos y palmeritas. El primer local lo inaugurarán en el Alto Rosario durante el invierno y ofrecerán distintos combos de churros y facturas con bebidas calientes. El paso que sigue contempla franquicias.