El 22 de agosto fueron notificados virtualmente que quedaron seleccionados para el lanzamiento.
Los cuatro alumnos y profesores de la escuela de Roldán irán a Córdoba a lanzar su mini satélite.
El próximo 28 de septiembre será el lanzamiento de los cinco mini satélites que quedaron como finalistas en la competencia Cansat Argentina y el protagonista santafesino es el que construyeron los estudiantes de la Escuela de Educación Técnico Profesional Nº643 Granaderos de San Lorenzo, de Roldán.
A pocos días del anhelado evento, no dejan de hacer la cuenta regresiva, envueltos en la ansiedad y la expectativa que les genera esta experiencia única que vivirán, tras seis meses de desarrollar el satélite que les dio el pase a la instancia final para verlo en plena acción.
La actividad se realizará en el Centro Espacial Teófilo Tabanera, de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), en Falda del Cañete, ubicada a 34 kilómetros de la ciudad de Córdoba.
Los roldanenses competirán con cuatro grupos de alumnos de Tucumán, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires (Caba).
Los cinco proyectos finalistas tendrán la oportunidad de lanzar sus cargas útiles desde el Centro Espacial, a bordo de cohetes que alcanzan una altitud aproximada de 400 metros. Luego podrán recuperar sus Cansat, descargar y procesar la información generada por sus misiones espaciales.
Marcelo Aimetta, uno de los profesores del proyecto, explicó que viajarán un día antes “porque tenemos toda una serie de pruebas técnicas del satélite, que luego se colocará dentro del cohete con su paracaídas enrollado. Este se va a abrir y va a empezar a hacer su trabajo”.
El docente precisó que el mini satélite, que es del tamaño de una lata de gaseosa y no más de 240 gramos, tomará muestras de aire para luego analizar en un laboratorio a cuánto micro plásticos haya suspendido en la atmósfera y aclaró que el dispositivo es reutilizable “si no se estrella cuando cae”.
La actividad va a ser monitoreada desde tierra con una interfaz gráfica que diseñaron los propios alumnos. “Buscamos inspiración en base de datos de universidades de México, Inglaterra y Países Bajos, y decidimos hacer algo más simple y que sea totalmente manejable, que se lo pueda llevar a un campo o a un parque industrial, tirarlo y que mida”, explicaron los alumnos.
“Creemos que fuimos seleccionados por la originalidad, porque fuimos los únicos con el enfoque de querer saber cuántos micro plásticos hay en el aire. Sabemos que aumentó muchísimo, pero no cuánto y lo elegimos por esa idea”, sumaron.
Los estudiantes se inspiraron en el conocimiento de que “hay rutas marinas que llevan a los polos micro plásticos de botellas, tapitas y todo tipo de PET, y también hay estudios recientes sobre el mismo tema pero en rutas aéreas. Sobre ese enfoque nos adaptamos para poder hacer el dispositivo y lanzarlo al aire”.
Ese día deberán pasar por todo un protocolo de seguridad para el lanzamiento. “Los cohetes tienen dos metros de alto y una velocidad de 700 metros por segundo, más o menos, por eso se activan desde lejos”, contó el profe.
Los alumnos que integran el equipo son Camilo Bondi Ferrigno (2º año), Ignacio Bianchimano (3º año), Santiago Giacolla (4º año) y Luka García (5º año).
“Hicimos como cuatro prototipos, algunos se estrellaron contra el piso cuando lo tiramos desde el techo para evaluar el paracaídas, también calculamos el diámetro del mismo, el largo del hilo, la velocidad de caída, porque todo influye. Nos ayudó la profe de matemática y física, Celina Cudiciotti, y con la programación, el profe del Instituto Paul Harris Willy Echarte”, destacaron los alumnos.
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Cansat es una competencia internacional impulsada por varias agencias espaciales del mundo, entre ellas la NASA de Estados Unidos y la ESA de Europa, y el país forma parte de una iniciativa organizada por Conae y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Su objetivo es alentar a estudiantes secundarios a construir los pequeños dispositivos, participar del proceso de una misión satelital y promover vocaciones científico-tecnológicas.
En esta segunda edición, en Argentina se inscribieron 490 equipos de 23 jurisdicciones y tras recibir capacitaciones por parte de especialistas para adquirir los conocimientos, herramientas y materiales necesarios para llevar adelante el desarrollo del proyecto, cada equipo realizó su misión Cansat.
Luego de diferentes instancias de trabajo y evaluación, el pasado 22 de agosto de 2023 se conocieron los cinco equipos seleccionados para lanzar sus cargas útiles en el Centro Espacial de la Conae, y la Técnica de Roldán que participó por segundo año consecutivo, llegó a la final.
El proyecto de la Técnica se denomina “Roldán 2”. Los otros finalistas son “ConcorSat”, de la Escuela San Roque González de Santa Cruz, de Concordia, Entre Ríos; “Cóndor Salvaje”, del Instituto Técnico de Aguilares, de Concepción, Tucumán; “Hyperion”, del Colegio León XIII de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; y “Novationes”, del Colegio Nacional de Monserrat, de Córdoba capital.
En 2022, otro equipo de la Técnica centró su proyecto denominado “Roldán 1, Misión Humedales” que consistía en detectar con el mini satélite, focos ígneos en las islas. Esta iniciativa quedó entre los 10 finalistas pero no dentro de los cinco que pudieron ir a realizar el lanzamiento a Córdoba.
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Los lanzamientos de la edición 2023 están previstos para el jueves 28 a la mañana, y por la tarde los equipos trabajarán en el análisis de los datos recabados por sus respectivas misiones. Los resultados obtenidos se difundirán al día siguiente en una actividad donde también recibirán charlas de empresas del sector espacial nacional y realizarán una visita al predio de la Conae y sus laboratorios.
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Por Tomás Barrandeguy