A fin de mes, la ciudad tendrá en funcionamiento cinco estructuras (tótems) con lectores de patente en tiempo real, que permitirán detectar autos y motos con pedidos de captura o que se hayan utilizado para cometer algún ilícito. Además, advertirán a los conductores que estén circulando a una velocidad superior a la permitida.
Los aparatos comenzarán a operar en paralelo a 70 cámaras de videovigilancia fijas y cuatro móviles, algunas de las cuales ya están funcionando a modo experimental y vienen detectando faltas que están siendo remitidas a sus autores vía correo electrónico.
Estas infracciones se envían a modo de aviso y aún no son multas propiamente dichas porque el sistema todavía no se instaló en su totalidad, lo que sí ocurrirá a fin de mes cuando todos los aparatos estén en funcionamiento. A partir de allí, las sanciones serán económicas y llegarán hasta los 300 mil pesos.
Todo lo que se recaude se destinará a fortalecer el sistema de salud pública y el fondo compensador del transporte.
En el mientras tanto, el municipio determinó que desde mediados de julio se cometieron más de 22 mil infracciones que se visualizaron a través del nuevo sistema. Las faltas fueron las siguientes: invasiones de carriles exclusivos, exceso de velocidad y giros indebidos, en ese orden de mayor a menor.
“Gracias a convenios con distintas áreas, tenemos los registros actualizados de los dominios del parque automotor y los contactos de los conductores, por eso hemos podido notificarlos a través del correo electrónico”, dijo a La Capital el secretario de Modernización, Germán Giró. De todas formas, en poco tiempo, cuando las penalidades sean económicas, llegará la notificación fehaciente en formato papel o en formato digital con la información sobre cómo accionar al respecto. Por ejemplo, pagando de modo voluntario con descuento o presentándose al descargo ante el juez de faltas que, incluso, se podrá realizar en modo virtual, a través del perfil digital.
Los tótems, cuya instalación comenzó hace pocos días, serán los dispositivos que, por su tamaño, llamarán la atención. Están montándose sobre varias arterias y cuentan con una señalética que le permitirá al conductor evidenciar a que velocidad está circulando y, al Estado, conocer qué vehículos pasaron por dicho sector.
Los cinco estarán en los puntos más transitados de la ciudad. Tres de esos sitios ya se encuentran definidos, mientras que se están ajustando las cuestiones técnicas de los otros dos para dar con la mejor ubicación.
Los primeros se ubicarán en la avenida Estanislao López 2472, sentido este-oeste (a la altura del parque Sunchales); avenida Belgrano 182 bis, sentido sur-norte (a la altura del Anfiteatro); y en la avenida Colombres 956, sentido sur-norte (a la altura de la usina Sorrento). Los otros dos se definirán en los próximos días, a partir de la factibilidad técnica, pero es un hecho que estarán sobre arterias de mucho flujo vehicular, peatonal y de bicicletas.
Esta tecnología cuenta con dos cámaras por cada carril, una detecta la patente del vehículo y la envía a un software que puede ser monitoreado en tiempo real. En paralelo, el sistema puede organizar listas y enviar alertas si detecta un vehículo buscado. La otra cámara, en tanto, permite conocer la velocidad a la que está circulando el vehículo (que se observa en una pantalla). Si bien estos tótems no van a utilizarse para labrar multas (a diferencia del resto del control electrónico), son muy efectivos a la hora de disuadir alguna conducta inapropiada.
Estos dispositivos serán la cara visible del sistema y su uso permitirá disuadir el exceso de velocidad y generar concientización.
Prueba
Los conductores en las ciudades tienden a superar los límites de velocidad permitidos habitualmente por distracción o mero desconocimiento de la máxima permitida en el lugar por donde transita y está probado que mostrar la velocidad que desarrolla en ese momento es un método muy eficaz para evitar accidentes.
Los tótems son reconocidos mundialmente como uno de los sistemas más efectivos para el control. A eso se le suma la posibilidad de interconectar el sistema lector de patentes con listas que provea el Ministerio de Seguridad de la provincia o el Ministerio Público de la Acusación, de modo de obtener alertas si algún vehículo en particular transita por alguno de estos espacios.