Con un presupuesto 932 millones de pesos, las obras de puesta en valor de la Plaza 25 de Mayo comenzarán este miércoles. Los trabajos en el espacio público más antiguo de la ciudad forman parte de las acciones que se están desarrollando para recuperar lugares emblemáticos del pasado rosarino en el año en que la ciudad celebra su tricentenario.
La Plaza 25 de Mayo se sumará así a otros edificios y paseos de la llamada manzana fundacional de la ciudad que se encuentran en obras como el Palacio Municipal, el pasaje Juramento y la Iglesia Catedral. Cuatro de las 300 obras emblemáticas que, con fondos municipales y provinciales, se desarrollan en Rosario para conmemorar los 300 años de existencia de la ciudad.
A esos orígenes se remontó el secretario de Obras Públicas del municipio, Juan Manuel Ferrer, para destacar la importancia del proyecto. "Es la intervención más importante que tiene la plaza desde sus inicios", apuntó a la par que anunció que los trabajos comenzarán este miércoles, con la llegada de las primeras cuadrillas y el armado del cerco de obra alrededor de todo el perímetro de la plaza.
La iniciativa plantea algunas novedades: la construcción de pasos a nivel para mejorar la conexión con el pasaje Juramento y con la peatonal Córdoba, la ampliación de las veredas perimetrales, mejoras en los canteros y nueva forestación. La intervención integral busca priorizar la circulación peatonal en una zona muy utilizada por los rosarinos, por lo que también se eliminará el estacionamiento a 45 grados por calle Córdoba.
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La remodelación de la histórica Plaza 25 de Mayo jerarquizará las sendas peatonales, y tendrá nuevos canteros además de mejores accesos a la peatonal Córdoba y al Pasaje Juramento.
La tarea fue adjudicada en abril a la empresa Electro Constructora, que presentó un presupuesto de $ 932.100.857,61 para realizar las obras que tienen un plazo estimado de 180 días para su ejecución, con lo cual el espacio público podrá reestrenarse sobre fin de año.
Ferrer explicó que los trabajos se desarrollarán en dos planos al mismo tiempo, sobre la superficie de la plaza y en sus contornos. Hacia el interior de la plaza se mejorarán las veredas y canteros con la renovación de césped y especies de plantas y se restaurará el mobiliario. Pero la verdadera transformación será en su perímetro donde se construirá un nuevo paseo peatonal alrededor del espacio verde.
De esa forma, se mantendrá la elevación que actualmente presenta el espacio verde, pero esta suerte de explanada permitirá mejorar la conexión con la peatonal y el pasaje Juramento. Además se construirán rampas en las esquinas de Santa Fe y Buenos Aires y de Laprida y Córdoba para hacer más accesible el espacio.
"Ambas tareas se desarrollarán en simultáneo con la idea de poder finalizar la obra antes de fin de año", apuntó Ferrer.
Las tareas comprenderán además la readecuación de desagües pluviales y la reubicación de sumideros, la ejecución de nuevo cordón cuneta y el bacheo en los solados interiores. También la renovación del equipamiento urbano, nuevo alumbrado, y trabajos de parquización y jardinería, preservando el arbolado y sumando más verde.
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La Plaza 25 de Mayo es el lugar más antiguo de la ciudad desde el punto de vista urbano y tiene un valor central en la historia de la ciudad. Todos los hechos más resonantes de la vida política de la ciudad atravesaron ese espacio verde: recibió el paso de Manuel Belgrano con sus patricios y cobija las rondas de las Madres de Plaza de Mayo Rosario. Por toda esa historia, es uno de los pocos lugares de la ciudad declarado como monumento histórico nacional.
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La plaza a principios del siglo pasado, cuando estaba rodeada por una reja y sus árboles aún eran pequeños.
Una manzana en construcción
Con el inicio de puesta en valor de la Plaza 25 de mayo, las dos manzanas que se extienden entre Santa Fe y Córdoba entre Laprida y Juan Manuel de Rosas estarán en obra.
En el pasaje Juramento, explicó Ferrer, ya se retiró el piso y se están empezando a colocar las nuevas baldosas, en paralelo se trabajó retirando el terraplén de tierra montado sobre el edificio del Palacio Municipal para impermeabilizar las paredes y volver a armar la estructura verde.
La fuente es otro de los frentes de trabajo: se trabaja en el retiro de las piedras de los piletones para impermeabilizarlos y está en marcha la restauración de las esculturas de Lola Mora que pueblan el pasaje.
Las obras de la Catedral ya tienen un avance del 50 por ciento. Los trabajos se concentran en la recuperación de las fachadas de piedra París y se avanza hacia las torres y la cúpula mayor. La labor concluirá con mejoras en la iluminación del templo.
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Por último, en el Palacio Municipal avanzan las tareas de la fachada de calle Buenos Aires. Se realizó gran parte de los arreglos de mampostería y la reconstrucción de molduras y detalles decorativos. Ahora la atención se centra en las tareas de pintura que ya comenzaron en la parte superior del edificio que dejará atrás su color borravino para recuperar su tono original, más cercano al de la Iglesia Catedral.
La idea es poder inaugurar todo el conjunto durante el mes de octubre, cuando se concentrarán los festejos del Tricentenario, donde el pasado y el presente volverán a dialogar.