Este martes se enviaron dos nuevas muestras desde Rosario al instituto Malbrán de casos sospechosos de viruela símica, conocida popularmente como viruela del mono. El jueves pasado se confirmó el primer positivo de un rosarino que había regresado a la ciudad el 23 de julio luego de viajar a Estados Unidos.
En este contexto, la secretaría de salud pública municipal emitió de inmediato un documento que distribuyó en todos los efectores para que los médicos conozcan en detalle el protocolo para atender posibles nuevos contagiados luego de que se confirmara el primer caso en la ciudad, y ante el incremento de pacientes en la Argentina y en todo el mundo.
La Capital confirmó que se intensifica la vigilancia clínica y epidemiológica en todos los centros de salud públicos y privados de Rosario.
En Estados Unidos, por ejemplo, ya son varias las regiones que declararon la emergencia sanitaria por viruela símica.
El lunes, autoridades sanitarias del Mercosur se unieron para determinar medidas conjuntas para poner freno al avance de esta virosis que preocupa a las autoridades sanitarias si bien no tiene el nivel de contagiosidad del Covid y la tasa de mortalidad es baja.
De todos modos, la OMS ya declaró como emergencia de salud global al detectarse unos 20 mil casos en 75 países.
En esta zona
El jueves se confirmó el primer caso de viruela símica (conocida popularmente como viruela del mono) en Santa Fe. El paciente es un rosarino que sigue aislado y en buen estado de salud general. Se trata de un varón de 35 años que regresó al país el 23 de julio desde los Estados Unidos y ese mismo día comenzó con síntomas compatibles con esta virosis.
Consultó en un efector privado y de inmediato fue asistido y le tomaron muestras que se enviaron al Malbrán vía el laboratorio del Cemar.
Ahora se sumaron nuevos sospechosos. La confirmación sobre si se trata o no de viruela del mono estará en las próximas horas. Las muestras se trasladaron a Buenos Aires siguiendo el protocolo nacional y los pacientes están aislados.
Alerta
En la Argentina ya son 24 las personas, la mayoría con antecedentes de viaje al exterior y con un promedio de edad de 36 años y hay decenas de muestras en análisis.
En el caso del rosarino que se enfermó, al día siguiente de arribar a la ciudad empezó a sentirse mal, con febrícula, débil y presentó lesiones cutáneas compatibles con viruela símica. Pocos días después se confirmó el diagnóstico.
Por eso, el área de Epidemiología municipal elaboró un documento con las recomendaciones para los equipos de salud y se adjunta la ficha epidemiológica que deberán llenar ante un caso sospechoso.
Lo primero que se detalla es, justamente, la definición de caso sospechoso: cualquier persona de cualquier edad que presenta una erupción vesicular que no corresponda a las principales causas conocidas de otras enfermedades, que tenga cefalea, fiebre, dolores corporales, debilidad y/o inflamación de ganglios.
Es necesario determinar también si la persona tiene un vínculo epidemiológico, es decir, si estuvo en contacto físico (no solo sexual) con una persona con síntomas o con la enfermedad, o si tuvo contacto con materiales posiblemente contaminados (como la ropa de cama) en los 21 días anteriores al inicio de los síntomas. También si viajó a países donde se están registrando casos de viruela del mono.
Cada caso sospechoso se debe notificar en no más de 24 horas al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud. El caso se confirmará por laboratorio, o quedará finalmente descartado.
El modo de determinarlo es mediante un diagnóstico molecular de muestras del líquido de las ampollas o pústulas que deben tomarse con una jeringa. El documento de Epidemiología determina el modo en que le deben transportarse las muestras.
Medidas necesarias
“Los trabajadores de la salud que atienden a casos sospechosos o confirmados de viruela símica deben implementar precauciones estándar, de contacto y por microgotas. Esto incluye protección para los ojos, barbijo quirúrgico, bata y guantes desechables. Durante la realización de procedimientos generadores de aerosoles los profesionales de salud deben utilizar máscaras N95 o equivalentes”, indica el instructivo.
Para evitar la transmisión dentro de los hospitales o sanatorios es importante que el paciente considerado sospechoso, en cualquier nivel de atención, evite el contacto con otros pacientes en sala de espera o salas de internación.
Las personas con síntomas deben realizar aislamiento estricto hasta obtener el resultado del laboratorio y utilizar en su hogar, si conviven con otros, es necesario que eviten estar cerca y que usen barbijo quirúrgico bien ajustado, cubriendo nariz, boca y mentón.
Si se confirma la enfermedad, el aislamiento deberá realizarse hasta que hayan desaparecido todas las lesiones.
Muchas de esas lesiones se ubican en el rostro. Las más profundas pueden dejar marcas severas.