En ese escenario, esta mujer discapacitada de 59 años reclama ayuda. Según relata, sacó un crédito de alrededor de 40 mil pesos en 2016 en la misma entidad donde cobra su pensión (Banco Columbia, de San Martín 866). Pensaba que el método de pago era mes a mes y que se efectuaba sobre sus cobros habituales.
Sin embargo, de acuerdo a lo que denuncia, la modalidad de descuento no fue la que le explicaron originalmente, y ahora le reclaman una exorbitante suma de 276 mil pesos. Una cantidad muy por afuera de sus posibilidades, ya que cobra la mínima, vive sola y únicamente trabaja cuando su cuerpo la deja, ya que acarrea un delicado estado de salud.
Beatriz Mantecon está desesperada porque el Banco Columbia le retuvo la pensión, y no tiene ingresos para disponer desde hace varios meses. Desde ahí cuenta las horas para ver si aparece una respuesta, una ayuda o alguna colaboración para poder salir de este problema que enfrenta y la pone ante la posibilidad cercana de quedarse en la calle.
Frente a estos inconvenientes, acudió a la Defensoría del Pueblo, donde hicieron una carta que presentó en el banco, pero el calvario y el padecimiento continúan, ya que no obtuvo respuestas.
"Yo en 2016 tenía una pensión graciable por mi hijo, que tenía leucemia. Luego me dieron a mí una pensión por discapacidad. En ese momento, una chica llamada Mariana me ofreció un crédito, y como yo estaba apretada de plata, acepté. Era un crédito por alrededor de 40 mil pesos", contó.
"En 2017 me venían algunos descuentos en los recibos y yo pensaba que eran las cuotas de ese crédito", apuntó la mujer.
Y agregó: "En marzo de este año, yo quería hacer un cambio de banco, porque siempre hay maltratos en esa entidad. La gente de ahí atiende muy mal. Sobre todo, la contadora que está a cargo. Me trataron muy mal y yo me sentí discriminada", aseguró.
Le retuvieron haberes
"En mayo me comenzaron a retener los haberes y cuando pregunté, me dijeron que era una deuda por ese crédito. Me dijeron que no había ninguna cuota paga y yo no entendía cómo no me avisaron antes. Se manejaron de manera muy extraña", subrayó la mujer.
"Y después se portaron muy mal, porque me hicieron firmar algo para recuperar mis haberes, y yo no sabía que eso implicaba reconocer la deuda", explicó entre lágrimas.
La mujer reveló que está atravesando un momento de salud muy complicado. "Soy discapacitada, soy asmática severa crónica, tengo Epoc (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) y además hace tres meses me sacaron del brazo un linfoma de Hodgkin, y ahora me tienen que volver a operar", remarcó.
"Y a todo esto, el dueño de la pensión me dijo que me dejará en la calle el jueves si no le pago. Ya no doy más. Cuando mi cuerpo me deja, yo trabajo. Soy acompañante terapéutica. Pero muchas veces no puedo", admitió.
"Yo siento que no puedo hacer más de lo que hice. Traté de impulsar un amparo, pero me dijeron que no correspondía. Ahora presenté una carta con el asesoramiento de la Defensoría del Pueblo. Estoy desesperada. No sé más qué hacer. No me pueden retener los haberes", reclamó.
Quienes puedan ayudar a Beatriz, pueden comunicarse al 153-978007.