El coleccionista argentino que compró en Inglaterra un casco de un veterano chubutense combatiente de Malvinas viajará en abril próximo a la Argentina para entregárselo al ex soldado.
Así lo expresó el hombre al diario El Patagónico en su edición de ayer, en donde destacó que planea llegar a la localidad chubutense de Sarmiento para devolverle el casco al veterano José Muñoz.
“Sentí que lo correcto era reunir el casco con José y el resto de los veteranos de Malvinas, que quede en el museo donde puede ser apreciado por futuras generaciones y mantener la historia viva”, confió Matías, desde la ciudad inglesa de Cambridge.
La historia del casco se conoció el 25 de agosto pasado cuando Muñoz, de 53 años, recibió el llamado de un argentino de 39 años con domicilio en Cambridge, quien se desempeña como mecánico aeronáutico y colecciona objetos de guerra.
El coleccionista le reveló en una comunicación telefónica a Muñoz que había comprado el casco con su nombre escrito a mano a un militar inglés y le envió fotos para demostrárselo.
El argentino residente en Inglaterra supo del veterano por un artículo periodístico que escribió el pasado 2 de abril en un medio local la periodista de Sarmiento Paola Muñoz, prima del ex soldado.
El comprador del casco explicó que, a través de un amigo de un militar inglés, había adquirido el casco que Muñoz usó durante la guerra, identificado por su nombre escrito a mano.
Muñoz ingresó en febrero de 1982 como conscripto al Regimiento de Infantería Mecanizado 25, con asiento en Sarmiento, y fue enviado a Malvinas el mismo 2 de abril.
El soldado fue tomado prisionero por los ingleses el día de la rendición argentina, ocurrida el 14 de junio de 1982.
Emocionante. José Muñoz podrá volver a tocar el casco que utilizó hace 33 años en la Guerra de Malvinas. Así lo confirmó Matías, el coleccionista argentino que lo compró y luego de una semana de gestiones confirmó que puede traerlo al país. “Esto para mí fue, es y siempre será una experiencia emocionante e inolvidable. Es un sentimiento hermoso poder hacer esto”, manifestó en diálogo con El Patagónico. Fueron siete días de emociones, tanto de este como del otro lado del océano. José Muñoz, de 52 años, y Matías, de 39, no olvidarán esta semana, donde gracias al destino se pusieron en contacto, dando origen a una nueva historia de la posguerra del conflicto de 1982, que tuvo como protagonistas a Argentina y el Reino Unido, y que ahora suma un nuevo capítulo.
Es que ayer el coleccionista confirmó a El Patagónico su deseo de viajar a Sarmiento y encontrarse con el veterano de guerra para, en persona, entregarle el casco que alguna vez utilizó en 1982. “Sentí que lo correcto era reunir el casco con José y el resto de los veteranos de Malvinas. Que quede en el museo donde puede ser apreciado por futuras generaciones y mantener la historia viva”, señaló Matías desde Cambridge, Inglaterra, agradecido por todo lo que se generó tras su contacto con Paola Muñoz, prima de José quien fue el nexo principal para que todo esto sucediera.
La periodista publicó el 2 de abril último en un portal de noticias la historia de José en la guerra. La crónica fue leída por Matías, quien al advertir en el casco el apellido de José y su regimiento, el 25 de Sarmiento, comenzó a buscarlo con el objetivo de decirle que lo tenía en sus manos y que iba a ser un honor cuidarlo. Así, el último lunes de agosto se comunicó con Paola y le dio la noticia. Casualmente en ese momento llegó José, quien dialogó con Matías en forma telefónica, dando inicio a esta historia.
Una alegría enorme. La noticia emocionó a Paola, quien confirmó la posibilidad a ese diario. Por supuesto también a José, que no espera la hora de que llegue el momento del reecuentro. “Es una alegría enorme que Matías tenga las mejores intenciones, va a hacer un viaje larguísimo y va a traerlo. Quiero tenerlo mañana, pero tengo que esperar. Soy un privilegiado de Dios, es algo grandioso para mí poder juntarme con este casco que usé en un momento en que mi vida corría peligro, y hoy tener esa satisfacción de volverlo a tener”, agregó. Se espera que Matías llegue en abril del año que viene, si todo sale bien, para un nuevo aniversario de la recuperación momentánea de las islas Malvinas, día en que la Asociación de Veteranos de Guerra de Sarmiento inaugurará su sede y museo.
En la comunicación de anteayer el coleccionista aseguró que no quiere dinero, tampoco que le costeen los pasajes, sólo estadía para él y sus padres, quienes quieren compartir este momento con él, cerrando esta historia con el reencuentro y un acto en el que José volverá a tener su casco y Matías será reconocido por el gesto que, como dice el antiguo soldado, “demuestra la clase de persona que es”.