El empresario Rodolfo Bomparola, detenido en 2013 como miembro de una banda de narcos VIP que comercializaba drogas en ámbitos frecuentados por personalidades del espectáculo, fue condenado a 4 años y 3 meses de prisión, tras un juicio abreviado en el que su defensa acordó la pena con la fiscalía, informaron ayer fuentes judiciales.
La condena fue dictada por el Tribunal Oral Federal 1, que rubricó un acuerdo en el que Bomparola (43), hermano de la diseñadora de indumentaria Evangelina Bomparola, se declaró culpable y aceptó esa pena gestionada entre su defensa y la fiscalía, añadieron las fuentes.
El detenido aceptó su culpabilidad como “coautor” del delito de “comercialización de estupefacientes”, hecho por el que además deberá pagar 9.000 pesos de multa. El juicio abreviado estuvo a cargo de los jueces Adrián Grunberg, Oscar Amirante y Pablo Laufer.
La causa tiene otros diez procesados, entre ellos la modelo Zahina Rojas, quien fue detenida al inicio de la pesquisa, procesada y excarcelada por orden judicial.
La causa fue inicialmente instruida por juez federal Norberto Oyarbide, quien dispuso el arresto de Bomparola y los restantes diez acusados, tras diversos operativos antidrogas, que incluyeron 15 allanamientos realizados el 27 de noviembre de 2013 en la Capital Federal y el conurbano por efectivos de la Superintendencia de Drogas de la Policía Federal.
Durante uno de esos operativos, uno de los sospechosos se suicidó cuando la policía fue a detenerlo en su departamento de la zona porteña de Las Cañitas.
Según fuentes policiales que actuaron en la causa, se trataba del sindicado cabecilla de la banda, Alejandro Héctor Chávez, quien ante la irrupción de los federales se disparó un tiro en la cabeza en su departamento del piso 11 del edificio situado en Olleros al 1800, de Las Cañitas, donde se halló un pan de cocaína de un kilo y medio.
La mayor cantidad de la droga secuestrada —cocaína, éxtasis, cristal, LSD— se halló en un departamento de la localidad bonaerense de Olivos.
En el marco de la causa instruida por el Oyarbide, los pesquisas determinaron que los detenidos integraban una banda que vendía al menudeo cocaína, marihuana, LSD, crack, éxtasis y cristal, principalmente en la zona de La Cañitas y a personalidades de espectáculo y de la noche porteña. Bomparola y la modelo Rojas cumplían el rol de distribuidores de los alcaloides.