El sacerdote José Miguel Padilla, que lideró la congregación de la Fraternidad de Belén, en La Pampa, será juzgado desde el 2 al 9 de mayo por abuso sexual agravado por ser miembro de culto. La denuncia la realizó un ex seminarista entrerriano. El juicio se realizará en la localidad de General Pico.
Padilla es el fundador de la congregación de frailes La Fraternidad de Belén, fue párroco de la localidad pampeana de Intendente Alvear y representante legal del Instituto Nuestra Señora del Luján, de la misma provincia. Tras la denuncia en su contra, se alejó de esta última institución y de la ciudad. Hoy se encuentra afincado en la provincia de San Luis.
La trayectoria de Padilla también se remonta a tiempos de la dictadura militar, cuando fue capellán del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 141 del Ejército de San Luis entre 1980 y 1983. Más tarde, durante el gobierno alfonsinista, adhirió al levantamiento carapintada de 1987.
El cura fue denunciado por abuso sexual en 2019 por Vicente Suárez Wollert, un joven oriundo de la localidad entrerrian de Santa Elena, quien estuvo en la congregación de Padilla en 2015, cuando tenía 19 años. Relató en la Justicia que llegó desde Santa Elena a la localidad pampeana de Intendente Alvear y se incorporó como seminarista en el convento de Padilla.
"En octubre de 2019 publiqué una serie de tuits donde fui contando lo que sucedió en el convento. La historia fue levantada por varios medios y, después de dialogar con mi familia y mi terapeuta, tomé la decisión de radicar la denuncia en la Fiscalía de General Pico. Así, la causa comenzó a tramitarse en noviembre de 2019 y en mayo de este año arranca el juicio. No digo que quiero una condena ejemplar, como por ahí se dice en este tipo de causas, sino que quiero una condena justa", contó el joven de 28 años.
Y agregó: "Los hechos ocurrieron en la Fraternidad de Belén, una congregación de Capuchinos Recoletos que fundó el cura Padilla en 1995, el mismo año en que nací. Cuando fui al convento tenía 19 años y denuncié los hechos a los 24".
El caso tuvo demoras en la justicia pampeana, situación que fue cuestionada por el joven y la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Argentina. Suárez Wollert, detalló: "A la semana de radicar la denuncia comienzan algunas diligencias judiciales y el sacerdote negó los hechos. Después la causa entró en un letargo: 2020 y 2021 no hubo novedades de relevancia. Se tomaron algunas declaraciones y a mí me hicieron la pericia psicológica. Además de la pandemia, todo se demoró porque pidieron un test específico que obligó a que el personal de la Justicia se tenga que capacitar al respecto".
Curas citados a juicio
"Cuando denuncié, presenté mucha información: intercambio de mails, notas a autoridades del Obispado y capturas en donde informaba en 2016 lo que estaba pasando. De los hechos estaban en conocimiento Raúl Martín, Obispo de La Pampa, y su auxiliar Luis Martín", agregó y señaló que ambas autoridades eclesiásticas declararán en el juicio, aunque lo harán por videoconferencia.
"Raúl y Luis Martín pidieron declarar en forma remota, estando en La Pampa, y se lo permitieron. En cambio, cuando yo pedí declarar de forma remota, me lo negaron. Yo fundamenté que no podía asistir, por cuestiones de salud mental, ya que es muy doloroso estar allí; y también porque en mi caso tengo que viajar casi 800 kilómetros, desde Santa Elena a General Pico. La Justicia me lo negó", completó el joven denunciante.
Al respecto del Obispo y su auxiliar, refirió que "ambos tenían conocimiento porque les mandé mails y notas". "Creo que a Mario Poli, cardenal primado de Argentina, también le llego información", añadió.
>> Leer más: Luis Ventura confesó que fue abusado por un cura a los 6 años
Suárez Wollert reiteró que alertó en 2016 a las autoridades de la curia de La Pampa, pero que nada hicieron al respecto. "Les había mandado mails alertándolos de lo que hacía Padilla. El Obispo me contesta uno de los correos electrónicos, invitándome a acercarme a La Pampa. Ahí le mando capturas y documental que acreditaba lo que estaba diciendo. Luego, cuando declara en la Justicia en 2019, el Obispo niega haberse comunicado conmigo".
Los Martín no son las únicas autoridades que mencionó el entrerriano en su testimonio en la Justicia pampeana. También contó que le relató lo sucedido a Héctor Aguer, Obispo de La Plata. Sin embargo, este no fue citado a declarar en el juicio.
"Cuando me fui de la congregación hago escala en La Plata, ya que debía tomar esa ruta para ir a Santa Elena. Una vez allí me dirijo al obispado de La Plata y pido audiencia con Héctor Aguer. Él me dice que tenía conocimiento de algunas irregularidades y me ofreció dinero para cualquier gasto. También me invitó a ingresar al seminario de La Plata", detalló al diario UNO de Entre Ríos