El volcán Llaima, ubicado e el sur chileno, entró violentamente en erupción y obligó a evacuar a decenas de turistas y suspender vuelos a Neuquén por el peligro que representaba la ceniza volcánicas en suspensión.
El volcán Llaima, ubicado e el sur chileno, entró violentamente en erupción y obligó a evacuar a decenas de turistas y suspender vuelos a Neuquén por el peligro que representaba la ceniza volcánicas en suspensión.
Ayer fueron rescatados 54 turistas que habían quedado atrapados en un parque nacional chileno fronterizo con la provincia de Neuquén, por las inundaciones que provocó el volcado de lava en el cono del volcán. También debieron ser evacuados decenas de pobladores de localidades aledañas al macizo. No hubo víctimas.
El Llaima es uno de los cuatro volcanes más activos de América del Sur y se ubica a unos 650 kilómetros al sur de Santiago, dentro del parque nacional Conguillío, cerca de la frontera con Argentina.
En la zona están las localidades agrícolas y turísticas Curacautín, Cherquenco y Melipeuco.
"Ya fueron rescatadas por personal de Ejército los 54 turistas que permanecían en la zona del parque nacional Conguillío. Igual situación se realizó con otras 11 personas, correspondientes a guardaparques y familiares", se indicó desde la Oficina de Emergencias chilena.
Salvataje demorado. Ayer, una neblina cubrió a la mañana al volcán, lo que había impedido utilizar helicópteros para el rescate de las personas atrapadas en el parque, por lo que se utilizaron camiones militares para cumplir con las labores de rescate.
El material incandescente (roca derretida) había alcanzado en el momento de las erupciones unos 300 metros sobre el cráter y cubrió unos 600 metros de la ladera este del macizo andino.
Pero, anoche ya se registraba una disminución de la actividad de energía asociada a los fluidos y expulsión de materiales.
Chile tiene más de dos mil volcanes, 500 de ellos considerados geológicamente activos y unos 60 con registro eruptivo histórico en 450 años.
"Una vez más nos amenaza una catástrofe natural", dijo la presidenta Michelle Bachelet, aludiendo al terremoto que sacudió al norte de Chile en noviembre del 2007.
"Se tomaron las medidas necesarias para evitar riesgos personales", agregó.
Belisario Velasco, ministro del Interior, señaló que "el volcán ha disminuido un poco su erupción durante el transcurso de la mañana" de ayer.
No obstante, la Dirección Nacional de Protección Civil de Argentina explicó que desde el lado argentino se observó una columna de gases y cenizas de tres mil metros de altura que afecta a 50 mil personas de la provincia de Neuquén.
Todos los registros sobre erupciones volcánicas en Chile presentan manifestaciones de algunos fenómenos previos como la emanación de humo en un cráter que parecía inactivo o la aparición de un nuevo cráter.
Esto puede durar algunos días, semanas e incluso años, hasta que una serie de temblores y ruidos subterráneos preceden a la salida de cenizas y lava, la que escurre entre 5 y 100 kilómetros por hora, dependiendo del desnivel geográfico, siguiendo las quebradas y desembocando en cauces de ríos o lagos.
La ira de Pillán. Algunos lugareños recordaron creencias mapuches sobre los volcanes, hogar de Pillán, padre fundador de razas y linajes.
Pillán entraba en erupción cuando algún comportamiento inadecuado lo enojaba. Los lugareños no le temían, lo respetaban "como a un padre" y se acercaban con ofrendas para hacerle peticiones de diversa índole. Además de humo, temblores y lava, el Pillán expresaba su ira con truenos y relámpagos.
El oficial chileno Francisco Subercaseaux, miembro de las campañas de ocupación de la Araucanía, a fines del siglo XIX, afirma que el volcán era denominado Chanel o Chañel (dedo) por los mapuches, debido a su anterior forma puntiaguda.
Luego, la naturaleza y los mapuches lo rebautizaron como Llaima (desaguadero o zanja), debido a las profundas grietas que abrió a su paso en sus laderas durante una enorme erupción producida en 1876. (Télam, DyN y Reuters)
En Argentina
La nube de cenizas del Llaima llegó a la Patagonia sin presentar toxicidad, pero puede provocar irritaciones a la vista o complicación respiratoria, indicó Defensa Civil de Viedma. En tanto, debido a la nube negra fueron demorados vuelos en el neuquino aeropuerto Presidente Perón.