El gobierno argentino aspira a que la vacuna rusa Sputnik V se fabrique en un futuro en el país. El designado embajador argentino en Rusia, Eduardo Zuain, afirmó que el Gobierno nacional busca avanzar “en un proceso de transferencia de tecnología” para que la vacuna Sputnik V “pueda producirse en Argentina”. Zuain dijo que su misión “será desarrollar la agenda del acuerdo de cooperación estratégica” firmado entre ambos países “con el objetivo primario de garantizar la provisión de la vacuna”, algo que hoy está lejos de suceder, dados los grandes retrasos en que ha incurrido Rusia en la provisión de la Sputnik V. Fuentes de la Cancillería aseguraron a medios de Buenos Aires que existe un plan para desarrollar la producción local de la vacuna, pero es a mediano plazo, y por ahora la prioridad es asegurarse la provisión que Rusia no está cumpliendo. No existe un proyecto técnico, ni hay fechas concretas para iniciar la producción nacional. La posibilidad de sumar a la Argentina a la producción la había sugerido en diciembre pasado el director del Fondo Ruso de Inversión Directa, Kirill Dmietriev, la institución a cargo de las ventas de la vacuna.
Zuain, quien se desempeñó como vicecanciller entre 2011 y 2015, y fue procesado por la causa del memorando de Irán, fue designado nuevo embajador en Moscú, medida oficializada este lunes en el Boletín Oficial.
En declaraciones a la agencia oficial Télam, Zuain recordó que “Argentina y Rusia firmaron un acuerdo de asociación estratégica (en abril de 2015)” y aseguró que su misión diplomática estará enmarcada en esa agenda de cooperación, “con el objetivo primario de garantizar la provisión de la vacuna, pero también con una agenda amplia en lo económico, político y en ciencia y tecnología”.
En relación a la vacuna Sputnik V, el ex vicecanciller puntualizó que la determinación del Gobierno es avanzar “en un proceso de transferencia de tecnología, para que eventualmente la vacuna pueda producirse en Argentina”. Luego fue más categórico: “Es un deseo, una aspiración y un objetivo estratégico de la Argentina empezar a trabajar para que un día esas vacunas se empiecen a fabricar en la Argentina”, afirmó Zuain al diario La Nación. Previamente había dicho a una radio: “Mi tarea en Rusia empieza por abogar porque continúen los envíos del modo más regular posible de vacunas a la Argentina. Y conseguir que en la Argentina se empiecen a fabricar vacunas. Vamos a hacer gestiones para iniciar un proceso que termine en eso: Argentina como centro de producción de vacunas. Tenemos que ir por eso”.
Sobre la vacuna y sus plazos de llegada a la Argentina, muy retrasados, Zuain señaló que “el esfuerzo está puesto en garantizar la continuidad de la provisión, teniendo en cuenta el gran esfuerzo que significa la producción”. “La prioridad es garantizar la continuidad de la provisión, buscando la mayor cantidad de dosis en el menor tiempo posible”, remarcó.
Fuentes de la Cancillería señalaron al diario La Nación que las negociaciones son, por el momento, conversaciones a largo plazo con las autoridades del centro Gamaleya, de Moscú. Pero subrayaron que el proyecto de producir la Sputnik V en el país existe y sería “una segunda etapa”, porque el primer paso es “garantizar que lleguen las vacunas prometidas”. Lo cierto es que no existe aún un proyecto técnico para construir en Argentina el laboratorio que fabricaría la Sputnik V, dato que da idea de lo lejano y genérico que es por ahora este plan, más bien una idea o esperanza del Gobierno.
La Sputnik V se produce actualmente, además de en Rusia, en India y Corea del Sur, mientras están avanzadas las tratativas para que Brasil se convierta también en fabricante. Pero por el momento Rusia no puede cumplir con los contratos firmados con Argentina. Según declararon en su momento el presidente Alberto Fernández y su ministro de Salud, Ginés Gonzáles García, a fines de enero se hubiese debido tener vacunadas a entre 5 y 10 millones de personas. Al 31 de enero, no se llegó a los 400 mil vacunados. En enero, el presidente Fernández había prometido que llegarían 5 millones de dosis, pero hasta el momento solo arribaron unas 880.000.
AstraZeneca
En tanto, Argentina ya es parte de un proyecto de fabricación de la vacuna británica de Oxford-AstraZeneca. En un laboratorio de la Provincia de Buenos Aires se produce el principio activo, que luego es enviado a México, donde se realiza la estabilización y envasado de la vacuna. Esta noche partió el segundo embarque del principio activo, suficiente para fabricar 6 millones de vacunas. El primero había salido el 20 de enero. Argentina debería recibir esta vacuna desde marzo próximo.