Buenos Aires.- Un avión Hércules de la Fuerza Aérea Argentina parte desde la base
de Palomar, para acercar ayuda humanitaria para los damnificados por el devastador terremoto
en Haití. "Lo que pasa en Haití es una verdadera y auténtica tragedia”, sostuvo la
presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, al despedir a la misión humanitaria.
Minutos antes de las 18, Cristina saludó uno por uno a los tripulantes del avión. La mandataria,
junto a la ministra de Defensa, Nilda Garré, recorrió el lugar y el interior de la aeronave.
El vuelo, en principio, debió ser abortado por motivos de seguridad cuando la máquina
carreteaba por la pista de El Palomar, en el partido bonaerense de Morón, luego de que una
parte de la carga se desplazó dentro del avión. Tras poco más de una hora de retraso, la aeronave
finalmente partió a las 19.50 hacia Haití.
“Pobreza e indigencia no alcanzan para explicar lo que sufre el pueblo de Haití”,
manifestó la jefa del Estado en la estación aérea de El Palomar, al despedir al contingente de
militares, médicos y funcionarios que viajaron al país caribeño.
Fernández de Kirchner reclamó a la ONU “un replanteo estratégico de lo que es Haití”
y si bien ratificó que el gobierno argentino redoblará la “asistencia” ante la
emergencia, advirtió que sólo con la misión de paz, integrada por personal militar, “no
alcanza”.
Frente a la situación desesperante que vive Haití advirtió que “estamos ante cuestión de
Naciones Unidas, que va a exigir por parte del secretario general (Ban Ki-moon) más compromiso de
los países que mayor responsabilidad en Haití”.
“Las cosas no pasan porque sí, no pasan porque salen de un repollo o por un terremoto, lo
que pasa en Haití es una verdadera y auténtica tragedia”, manifestó Fernández, quien recordó
su visita a Puerto Príncipe, en marzo de 2008, su recorrida y el encuentro con el presidente René
Préval.
“No quiero ni imaginarme lo que es después de esta tragedia”, afirmó la presidenta,
quien también resaltó que “la cantidad de muertes tiene que ver con la pobreza y
miseria”, ya que la “población es muy vulnerable”.
“Cuando estuve la desocupación llegaba a más del 70 por ciento”, recordó.
“Haití necesita otro tipo de cosas, no se soluciona con la misión, más allá de todo el
empeño que ponemos no basta con una misión militar de seguridad, se requieren fuentes de trabajo,
porque la gente no tiene de qué vivir”, continuó.
Finalmente, recordó que el gobierno de Haití la última recomendación que tuvo del Fondo
Monetario fue que “no se dedicara a cultivar arroz, sino que fuera un país de servicio, y así
terminó Haití”.
El gobierno decidió que mañana parta otro avión con más asistancia hacia Haití, y autorizó la
designación del
comandante general retirado de Gendarmería
Nacional Gerardo Chaumont como nuevo jefe de la Policía de Haití, tras un requerimiento de
Naciones Unidas.
(DyN)