Los diálogos entre el gobierno y la oposición para resolver la crisis de Venezuela quedaron en "terapia intensiva" luego que la oficialista Asamblea Constituyente aprobara la convocatoria a elecciones presidenciales adelantadas para antes de fines de abril, aseguró ayer uno de los negociadores opositores. La decisión de las autoridades crispó las tensiones políticas y las divisiones entre los opositores que no logran ponerse de acuerdo para hacer frente al nuevo escenario político, situación que amenaza con profundizar la crisis social y económica del país sudamericano. El negociador y diputado opositor Luis Florido dijo que el llamado de esos comicios en la víspera va en contra de los esfuerzos que realizan para alcanzar un acuerdo en las negociaciones que se llevan a cabo en República Dominicana, con la mediación de varios países de la región, y en las que la oposición exige elecciones limpias y competitivas. Florido refirió que se había presentado un "documento consensuado" al respecto por parte del ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero y los cancilleres de México, Chile, Bolivia, Nicaragua, República Dominicana y San Vicente y las Granadinas. "Si el gobierno no tiene la intención de mantener lo que dice ese documento (de los cancilleres), pues la negociación no tendrá vida en el futuro", advirtió.