Buenos Aires. — Venezuela anunció ayer que presentará una propuesta concreta
para "un plan de paz" con Colombia en la reunión extraordinaria de cancilleres de la Unasur que se
realizará mañana en Ecuador y reclamó a Bogotá "una rectificación a fondo" para destrabar el
conflicto entre ambos países. El canciller venezolano, Nicolás Maduro, realizó ese anuncio en la
residencia de Olivos luego de reunirse con Néstor Kirchner, secretario de la Unasur, y con la
presidenta Cristina Fernández.
Venezuela rompió relaciones con Colombia la semana pasada a raíz de la denuncia
del presidente colombiano, Alvaro Uribe, ante la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre la
presencia de guerrilleros de las Farc en territorio venezolano.
Alerta en la frontera. Casi de inmediato, el presidente venezolano, Hugo Chávez,
rechazó las denuncias, rompió relaciones con su vecino —que desde hace 8 años viven en un
sube y baja— y puso en alerta a sus fuerzas armadas en la frontera. Pero el gobierno
colombiano, el mayor aliado de Estados Unidos en la región, dijo que no movilizaría tropas. Y
analistas ven poco probable que se llegue a un choque armado. "Nuestro gobierno presentaría en la
reunión de la Unión de Naciones Sudamericanas, en Quito, una propuesta concreta que permita
canalizar una metodología para un plan de paz", señaló Maduro en la conferencia de prensa que
ofreció en la quinta presidencial acompañado por el canciller argentino, Héctor Timerman.
Por su parte, el gobierno colombiano adelantó que asistirá a la cumbre de Unasur
en Quito, aunque aclaró que rechazará la iniciativa anunciada por Maduro por considerarla una
injerencia en los asuntos internos del país. Dijo asimismo que continuará con su denuncia ante la
OEA sobre la presencia de miembros de las Farc en territorio venezolano.
Aunque no dio ningún detalle, el enviado de Chávez explicó que su gobierno "cree
que es necesario que haya una rectificación a fondo del futuro gobierno de Colombia en su relación
con Venezuela". "Como ustedes saben, ha habido y hay voluntad política para construir un nuevo tipo
de relación, pero que se base en el respeto absoluto de las instituciones y de la sociedad
venezolana", aclaró. No obstante, dio una señal de distensión al considerar que "hay signos
ideológicos distintos entre quienes dirigen y van a dirigir Colombia", en referencia al actual
mandatario Alvaro Uribe y su futuro sucesor, Manuel Santos que asumirá el cargo el 7 de agosto
próximo.
Posición argentina. Por su parte, Timerman destacó que "el gobierno argentino
siempre ha contribuido con su mejor esfuerzo a lograr la paz en América latina y a fortalecer los
procesos de integración regionales". "Con el conflicto que se ha desatado entre repúblicas hermanas
también la Argentina va a hacer el máximo de los esfuerzos para ayudar a que los dos países
encuentren un camino y una posibilidad de un diálogo para llegar a la paz. Para eso hay que
escuchar y es lo que estamos haciendo en este momento", acotó.
Maduro, que previo al encuentro con el matrimonio Kirchner en Olivos había
pasado por Brasil, Paraguay y Uruguay, viajará hoy a Chile, Perú y Bolivia, advirtió que Venezuela
va "a esperar la llegada del nuevo gobierno y que evolucionen los acontecimientos para poder
avanzar en el sentido que se ha propuesto". Asimismo, enfatizó que están "a tiempo de reaccionar
frente al despliegue de una estrategia militar" de Estados Unidos.