Dos importantes sectores del centro de la ciudad quedaron ayer a oscuras por más de 15 horas y se desplegó un festival de generadores de electricidad y de persianas bajas en varios comercios. En la Empresa Provincial de la Energía (EPE) aseguraron que el desperfecto no tuvo que ver con el calor ni la alta demanda sino con una doble falla en un cable viejo, que hubo que cambiar por completo. La explicación estuvo lejos de templar los ánimos de los usuarios afectados que quienes, decepcionados, vaticinaron: "¡Qué nos espera en pleno verano!".
Las zonas que sufrieron el apagón desde la medianoche del martes hasta a las 15.45 de ayer fueron las delimitadas por Rioja, San Juan, Dorrego y Entre Ríos. Y Catamarca, Sarmiento, San Luis y Corrientes (ver infografía).
"Continuamos realizando maniobras y tareas para el acondicionamiento de la infraestructura eléctrica, pero sin perjuicio del servicio. Cuando ocurren estas cosas no es posible calcular con precisión cuántos fueron los clientes afectados, no es como en una tormenta. Hablamos de casos puntuales, pero que afectaron a dos zonas importantes del centro y el microcentro", dijo el jefe de área de relaciones institucionales de la EPE, Marcelo Vecellio, cuando ya se había aplacado la furia de usuarios, entre ellos decenas de comerciantes.
Es que justo en el horario de apertura de los locales de la peatonal Córdoba, cuando apenas arrancaba la mañana, se comenzaron a escuchar los ensordecedores motores de los generadores de energía.
En el microcentro, desde Mitre hacia el oeste y sobre la vereda par, la mayoría de los dueños de los negocios y empleados llegaron y se encontraron sin luz. Entonces, los cartelitos con la leyenda "Abierto" proliferaron sobre las persianas que no pudieron levantarse por la falta del suministro eléctrico.
"En la empresa que hace el monitoreo de la alarma nos dijeron que el corte empezó a la madrugada", contó Victoria, encargada del Bar Handicap Express, que lleva pocos meses funcionando en Córdoba al 1200.
"Si esto empieza así ahora, que todavía no hace tanto calor, ¿qué pasará a partir de diciembre?", preguntó la joven.
Al lado, en la pilchería de Córdoba y Mitre, también trabajaron gracias a la ayuda del equipo generador y los empleados recordaron lo que padecieron todo el verano pasado por culpa de cortes de entre tres y hasta cuatro horas de duración.
El apagón no quedó circunscripto a la peatonal. En una verdulería ubicada sobre la cortada Ricardone, las heladeras estaban todas apagadas. Y en San Luis al 1600, una sucursal de Royal tuvo que trasladar toda la mercadería fría a otros locales. "El generador es sólo para las luces y las cajas, pero no alcanza para las heladeras", explicaron.
Vecellio, en tanto, dijo que la EPE tenía detectado el cable en mal estado y que se había tendido otro para repararlo, pero fue imposible cumplir ese objetivo porque las dos fallas les ganaron de mano a las cuadrillas. Ayer, dos de esos equipos tuvieron que apostarse por horas en San Lorenzo y Mitre y en San Luis al 1600.
El desperfecto le jugó a favor al diputado provincial justicialista Mario Lacava, quien denunció el jueves pasado en el recinto de la Cámara baja santafesina que los incrementos de tarifas no se destinan a las inversiones para las mejoras de servicios eléctricos y de agua sino a aliviar el Tesoro.
La queja del legislador fue acompañada por un pedido de informes a la Casa Gris para que explique si se cumplieron las inversiones previstas para este año, tanto en la EPE como en Aguas Santafesinas SA (Assa).