Una mujer que busca a su hijo desde hace 17 años, cuando fue supuestamente raptado en un balneario en Tucumán, recibió un mensaje en el que se le comunica que está vivo y reside en los Estados Unidos.
Una mujer que busca a su hijo desde hace 17 años, cuando fue supuestamente raptado en un balneario en Tucumán, recibió un mensaje en el que se le comunica que está vivo y reside en los Estados Unidos.
"Mi corazón dice que estoy cerca", afirmó esperanzada Leonor Peralta, la madre que hace 17 años busca recuperar a su hijo, desaparecido en el balneario Las Salinas de la provincia norteña.
A través de Facebook, una ciudadana estadounidense se comunicó hace unos días con la familia de Duilio Nahuel Fernández (actualmente de 21 años) y les aseguró que el joven está vivo y reside en Estados Unidos con otra identidad. Les dio otros detalles e incluso hablaron por teléfono.
Leonor Peralta lleva adelante una búsqueda que nunca tuvo resultados. La inició el mismo 1 de enero de 1996 cuando su pequeño hijo de tres años se esfumó de sus ojos en medio de una tormenta en la zona del río.
"Necesito que me ayuden. No confío en la justicia. Pero tengo la esperanza de que todo esto que pasó en la última semana me conduzca a mi hijito. Pasé por muchas situaciones, de llamados y pistas que no llegaban a nada", dijo ayer Leonor.
"Creo que esto es distinto. Tal vez me puedan ayudar el FBI, la Embajada de Estados Unidos, la Interpol o las organizaciones que buscan personas desaparecidas", dijo.
El inesperado contacto apareció por Facebook. "Se trata de una mujer norteamericana, que vive en el estado de Washington. Vio la foto modificada de Duilio y se contactó con mi prima a través de Facebook. Le dijo que en 2003 mi hijo estuvo viviendo en su ciudad con una mujer. Que había sospechas de que el nene no era suyo. Y que luego desapareció. Tiene el nombre de la señora y también del niño que la acompañaba, que se llama David", explicó Leonor.
La potencial testigo es Vicky Cousin, al menos así figura en su perfil de Facebook, según dijo Leonor. La familia de Duilio pudo hablar telefónicamente con ella, varias veces.
"Le hicimos muchísimas preguntas. Nos habló de un colegio puntual, porque allí iba su hijo. Nos dio características del nene, de la mujer. Sabe los nombres y que viven en una casa rodante. Dice que hizo llamados a Interpol y al FBI, pero no tuvo respuesta", relató Leonor.
"Está dispuesta a colaborar con la justicia. Yo creo que sabe más de lo que dice. Pero necesitamos ayuda, de todos. No me quiero ilusionar, pero de verdad siento que esta vez puede haber algo concreto. Desde que esta mujer apareció, y fuimos averiguando detalles, mi corazón no para de latir. Ojalá investiguen a fondo, como nunca lo hicieron", dijo finalmente.
El primer contacto de la ciudadana estadounidense fue el 21 de noviembre, quien lo dirigió al perfil de Andrea Fernández —prima de Leonor— en la red social.
El mensaje, escrito en inglés y traducido por la familia, es el siguiente: "¿Alguien habla inglés? Es muy difícil para mí, es acerca de Duilio Nahuel Fernández. Soy Vicky Cousin. He estado buscando a la familia desde 2003. Agentes de la ley no ayudan. Duilio está vivo, pero no sé dónde está ahora. La mujer que fingía ser su madre despertaba sospechas, así que huyó en 2003.", escribió la mujer.
En ese mensaje, que derivó en un intenso intercambio, también afirmó que Interpol no trabajó correctamente.
Entorpecido. El caso de Duilio Fernández tuvo repercusión nacional, aunque el hallazgo de un cuerpo a 108 días de la desaparición interrumpió la investigación. Un cadáver encontrado a la vera del río se pensó que era el de Duilio. Se tardó un año en probar, mediante estudios genéticos en el Hospital Durand, que los restos no pertenecían al chico sino a una niña.
"A esa altura ya era prácticamente imposible remontar el tiempo perdido", dijo por su parte María Ester Cohen Rúa, titular de la Comisión Esperanza, que colabora en la búsqueda desde el origen del caso. "Igual se siguió luchando. La familia jamás bajó los brazos", afirmó.