Un hombre de 64 años fue condenado a prisión perpetua por el femicidio de su pareja Ana Gabriela Benítez cometido en enero de 2020 en un camino rural cercano al ingreso a la localidad de Alejandra, en el centro santafesino. Se trata de Carlos Ermindo Usprung, sentenciado en un juicio oral realizado en Reconquista ante un tribunal conformado por los jueces Martín Gauna Chapero, Santiago Banegas y Gonzalo Basualdo. Los fundamentos del fallo se conocerán en los próximos días.
El fiscal Aldo Gerosa se mostró satisfecho con el fallo. “Fue condenado a la pena que solicité y por la calificación penal que propuse en la acusación”, sostuvo el funcionario del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
El femicidio ocurrió entre las 0 y las 4 del sábado 18 de enero de 2020, según recordó Gerosa. Horas antes, “alrededor de las 21 del día anterior, Usprung pasó a buscar a su pareja en un Renault 9 por la casa de ella y luego de un corto viaje, estacionó el auto en un lugar oscuro y poco transitado, a dos kilómetros del ingreso principal a Alejandra y en inmediaciones del llamado «camino a Pirulo Giménez» y la ruta provincial 1”.
“Usprung —abundó el fiscal— mató a su pareja presuntamente a golpes. Dejó el cuerpo sin vida dentro del auto y luego roció el vehículo con dos bidones de nafta que había llevado consigo. Ocasionó un foco ígneo principal debajo del asiento del acompañante y otro secundario, entre la segunda fila de asientos y el lado derecho del sector del baúl, por lo que el cuerpo de la víctima se quemó hasta calcinarse casi totalmente”.
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El fiscal afirmó que a raíz del incendio llegó al lugar personal policial. Allí los unifomados encontraron a Usprung quien alegó que había ocurrido un accidente. Sin embargo enseguida constataron que la ropa del hombre estaba impregnada de combustible. Además en el auto se encontraron una maza de hierro, un cuchillo tipo facón, sogas y una serie de mangueras.
“Dada la muerte de Benítez y que Usprung no resultó herido en lo que él definió en un primer momento como un accidente, fueron interrogados familiares y allegados a la pareja que dieron cuenta del maltrato físico y psicológico que sufría la mujer”, sostuvo el fiscal sobre cómo se encaminó la investigación. “Aunque ella —añadió— nunca radicó una denuncia, se logró reconstruir que el agresor la sometió durante por lo menos dos años a numerosas situaciones de violencia de género”.
Gerosa destacó además el trabajo de los forenses que analizaron el cadáver de la víctima, “detectaron hemorragias previas a la carbonización y patrones contundentes de que la mujer no respiró el humo del incendio. Por la cantidad y localización de las heridas en el cuerpo de Benítez, los médicos descartaron que hayan tenido causas naturales”, señaló el fiscal, para concluir: “Estos datos fueron contrastados con gotas de sangre que quedaron en la ropa del condenado y el resultado llevó a presumir el ataque a golpes”.