En la ciudad ya hubo siete homicidios en lo que va de enero. El último se produjo ayer a la
mañana. Un playero de 32 años fue asesinado de un tiro en el pecho al tratar de evitar un asalto en
la estación de servicios de Circunvalación y 27 de Febrero. El drama se desató cuando su patrón
llegó en pleno atraco y les gritó a los maleantes. El empleado tiró los billetes al aire y en una
fracción de segundo el robo condujo al homicidio. Este crimen ocurrió sólo ocho horas después del
asesinato de un comerciante en villa Banana (más en la página 41).
Cuando Ernesto Fabián Maidana, de 38 años y padre de una nena de 2, tiró
al aire el dinero que llevaba en la billetera, uno de los ladrones se enfureció y tras dedicarle un
insulto le disparó a sangre fría en el pecho. El proyectil le ingresó al trabajador entre la axila
y la tetilla derechas y quedó alojado en su cuerpo. En el acto, y en otra salida demencial, el
tirador giró y abrió fuego hacia donde estaba parado el dueño.
Sólo por un acto reflejo el propietario de la estación se arrojó al piso
y el proyectil le rozó el cuello. Ese plomo impactó contra un camión cisterna que estaba detrás del
hombre y una de las esquirlas de la munición le dio en la nuca, lo que le provocó una herida leve.
Luego los ladrones juntaron los cuatro o cinco billetes que quedaron sobre el suelo y huyeron en su
moto.