Siglo XXI, los medios predican la libertad de expresarse, la posibilidad de informarnos y entretenernos sin ningún tipo de trabas. Pero también advierten que cierta ley los va a dejar sin trabajo. ¿Es así? ¿Realmente existe la libertad de expresión fuera de los monopolios mediáticos? En esta época de "libertad de expresión" alguien tiene que sufrir la censura en la peor de las formas (si es que existe), una censura implícita, oculta, oscura. Hace dos semanas los oyentes del programa "La venganza será terrible" tuvimos que conocer una noticia desagradable: Radio 10 decidió no renovar el contrato de Alejandro Dolina, ni a ninguno de sus compañeros del programa. Casualmente hace unos meses el "Negro" se declaró a favor de la ley de medios, unas semanas después habló sobre la forma en que los medios trataron las declaraciones de Maradona. Poco tiempo después de esto, comenzaron los problemas con las salas donde se transmite el programa, no les daban la sala que pedían, cambiaban de lugar sin avisar. El "Negro" pidió una reunión con la gente de la radio y un mes después nos comunicó a sus oyentes que no habría más programa. A mí solo me queda pensar que en esta era de libre expresión, lamentablemente nadie quiere el programa, cuando es uno de los programas más escuchados en la radiofonía argentina. ¿Será posible que ninguna radio quiera realizar un aporte a la cultura? ¿Tanto molesta tener a alguien que hable con elocuencia, cuyas historia son fabulosas y sus chistes están completamente alejado de la grosería? Sólo me quedan sensaciones de amargura: porque, aunque no quiera, el año próximo nos quedamos sin programa y sobre todo porque aunque hago alardes de vivir en democracia no puedo evitar pensar que por haber hablado, lo echaron a Dolina.