Hace muchos años, cuando todavía no iba a la escuela, mi abuela me contaba historias del reino del revés (donde se caminaba con las manos y se pensaba con los pies). Lamentablemente me parece que esto está totalmente vigente en nuestro país. Si no cómo entender lo sucedido con la barra brava del club Colegiales cuyo jefe en una pelea interna muere acribillado a balazos y luego tenemos que aguantar por tele un show completo de desmanes, disturbios, alabanzas, acusaciones entre intendentes, militantes pagos por el estado, roturas de moviles policiales, saqueos, etc, y no hay un solo demorado. Y en esos momentos, no apareció ninguna autoridad (muchos de los cuales van por la reelección). Y si hablamos de los candidatos para estas elecciones, tenemos que acordarnos de Gardel cuando cantaba “yo sé que ahora vendrán caras extrañas”. Es difícil conocer en esta ciudad el pedrigree de todos los candidatos. Siempre fue así; pero otrora había un partido político que respaldaba a cada candidato. Ahora no se sabe quiénes son, que currículum tienen y qué plataforma y orientación política los sustenta. Entonces sólo nos queda elegir por la foto y la sonrisa. Me parece muy poco serio. Además, ¿a quién le reclama la patria por los desmanejos que pueden efectuar estos incipientes políticos? Para terminar, el recuerdo del Día de la Lealtad mostró la gran atomización que existe entre los popes justicialistas, y me viene a la memoria un cantito: “Unidos venceremos; desparramados, qué hacemos”. Si este país sólo se aferra a la obtención de derechos, impunidad y feriados largos tendrá gran dificultad para adquirir el rango de país serio; y creo que para lograrlo debe mechar lo otro con un poco de obligaciones, justicia y esfuerzo.
Nelso Moirin