Powell luego de anunciar una nueva suba de tasas de la FED.
La Reserva Federal (FED) de Estados Unidos subió ayer 75 puntos básicos la tasa de interés que regula el costo del dinero, en un rango de entre 3% y 3,25%, con el objetivo de controlar la inflación en ese país y no descartó la posibilidad de que se realicen nuevos ajustes en el futuro.
La decisión, que era esperada ansiosamente por el mercado convulsionó las plazas financieras del mundo. El Dow Jones en Wall Street cerró con pérdidas del 1,7% y tocó el mínimo en tres meses y el Nasdaq retrocedió un 1,79%. Los granos también retrocedieron en Chicago, especialmente soja y maíz ante la decisión de la FED. El contrato noviembre de la oleaginosa cerró en u$s 536,92 la tonelada.
En Argentina el índice S&P Merval retrocedió 0,64%, en línea con el mal rendimiento de los mercados de referencia y las acciones de empresas argentinas que cotizan en Nueva York cayeron hasta 5,6%.
“El Comité Federal del Mercado Abierto decidió elevar el rango objetivo para la tasa de fondos federales de 3 a 3,25% y anticipa que los aumentos continuos en el rango objetivo serán apropiados”, señaló el organismo en un comunicado.
“Además, el Comité continuará reduciendo sus tenencias de valores del Tesoro y deuda de agencias y valores respaldados por hipotecas de agencias y está firmemente comprometido a devolver la inflación a su objetivo del 2%”, agregó la FED.
Enfatizó que “continuará monitoreando la información del panorama económico y estaría preparado para ajustar la postura de la política monetaria si surgen riesgos que impidan el logro de los objetivos”.
El directorio de la FED también fijó nuevas proyecciones de actividad económica, inflación y desempleo. Estimó que el PBI de EEUU crecerá este año apenas 0,2%, contra el 1,7% previsto en junio. En relación con la inflación, 2022 terminaría con una tasa de 5,4%, mientras que para 2023 proyecta que la suba acumulada será del 2,8%. El desempleo se espera que llegue 3,8% en 2022, mientras que para 2023 alcanzaría 4,4%.
El presidente de la FED, Jerome Powell, reveló que los funcionarios del directorio quieren asegurarse que la inflación está retrocediendo a su objetivo del 2% antes de detener los aumentos en las tasas de interés.
Dijo que la solidez del mercado laboral está impulsando mejoras salariales que son las que “están ayudando a aumentar la inflación”.
“Si queremos iluminar el camino hacia otro período de un mercado laboral muy fuerte, tenemos que dejar atrás la inflación. Ojalá hubiera una forma indolora de hacerlo, pero no lo hay”, advirtió Powell. “Nadie sabe si este proceso conducirá a una recesión o, de ser así, cuán significativa sería esa recesión”, agregó.
El funcionario admitió que “es posible una recesión, particularmente si la FED tiene que seguir ajustando agresivamente y nadie sabe si este proceso conducirá a una recesión o, de ser así, qué tan significativa será”.
Los efectos de la pospandemia y la guerra impactan con fuerza en las economías más desarrolladas. Economistas de Deutsche Bank prevén que la zona euro enfrentará una recesión más profunda de lo previsto luego de que Rusia detuviera las entregas de gas natural a través del gasoducto Nord Stream 1. La producción se contraerá un 2,2% en 2023, cuando poco antes se estimaba que sería del 0,3%. También que el Producto Bruto Interno (PBI) de Alemania, que se encuentra más expuesto a menores envíos de energía, caerá hasta un 4%.
Los sindicatos de la administración central se reunirán este martes con funcionarios a partir de las 11.30. Los docentes lo harán a partir de las 15.30.
Por Lucas Ameriso