La Secretaría de Agricultura incorporó finalmente al maíz y a la cebada cervecera al Programa de Incremento Exportador (PIE) que definió un aumento del tipo de cambio diferencial de $ 300 a $340 para las economías regionales.
La Secretaría de Agricultura incorporó finalmente al maíz y a la cebada cervecera al Programa de Incremento Exportador (PIE) que definió un aumento del tipo de cambio diferencial de $ 300 a $340 para las economías regionales.
De esta forma, el mercado de maíz concentró el grueso de los negocios en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Para entrega inmediata, contractual y para las fijaciones de mercadería, el precio propuesto fue de $ 62.000 la tonelada, lo que implicó un salto de $ 10.000 respecto a la última oferta que se realizó la semana pasada. También creció de manera significativa el volumen comercializado durante la jornada. Según el Monitor SIO-Granos, hasta las 19 horas, se llevaban negociadas 368.696 toneladas, frente a las 73.700 toneladas que se vendieron el lunes.
En el caso del maíz, se trata de uno de los principales cultivos junto a soja, trigo y girasol, y se espera que con este tipo de cambio diferencial se liquiden unos u$s 2.000 millones.
En la norma, Agricultura estableció los volúmenes de equilibrio de la campaña 2022/23. Se trata del tonelaje que deben garantizar para abastecer el mercado interno, antes de exportar. Para el maíz se fijó en 26 millones de toneladas; para el sorgo, en 950.000; para la cebada forrajera, en 2,6 millones; la cebada cervecera, en 950.000; y la malta, en 550.000. En el caso del complejo girasol, los volúmenes de equilibrio son 145.000 toneladas para la semilla; 1,1 millones para el aceite; y 1,15 millones para la harina.
La incorporación del maíz a dólar agro motivó quejas de las entidades que conforman la mesa de enlace agropecuaria y de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
La BCR consideró que es una medidas “coyuntural y de corto plazo que daña severamente a la actividad agroindustrial”.
“Presentada en su primera edición como un mecanismo excepcional para recomponer divisas, se terminó transformando en una herramienta periódica de intervención de los mercados, cuyos resultados ya conocemos: pérdida de transparencia en formación de precios, distorsiones y asimetrías hacia el interior de toda la cadena de producción y comercialización”, reseñó la entidad. En un comunicado instó a “dejar de lado estas disposiciones distorsivas y establecer un marco general con reglas claras, simples y de largo plazo que den previsibilidad a la producción e inversión”.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe) rechazó el dólar agro y consideró las medidas como “especulativas, distorsivas y de corto plazo”.
“La intervención de los mercados genera deformación en los precios, deformación de base en los costos y tiene solamente un propósito recaudatorio por parte del Estado. El maíz, específicamente (cultivo que fue severamente afectado por la sequía y tuvo una magra cosecha), es muy utilizado como insumo en otras actividades agropecuarias. Es fundamental en la producción avícola y porcina y un recurso muy significativo en la producción de carne y de leche. Por lo tanto, el aumento artificial del precio afectará los costos y se verá reflejado en los precios que pagarán los consumidores argentinos”, reflexionó.
El secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, defendió la medida del gobierno y destacó la decisión del ministro de Economía, Sergio Massa, de eliminar las retenciones para todas las economías regionales a partir de septiembre. El funcionario expuso en el marco de la XLV reunión ordinaria del Consejo Federal Agropecuario (CFA).
Agricultura destacó en un informe que las economías regionales generaron el año pasado “más de u$s 7.000 millones y 4,8 millones de toneladas en exportaciones”. Agregó que “más de 50 cadenas de las economías regionales están incorporadas al Programa de Incremento Exportador (PIE), entre las que se cuentan la olivícola, pesquera, vitivinícola, apícola, foresto-industrial, girasol, frutícola y hortícola”.
En este aspecto, la Cámara Argentina del Maní expresó que ve de manera positiva la quita de los derechos de exportación para el cultivo, medida que el sector venía solicitando desde hace tiempo. “La efectivización de la misma es sumamente necesaria para que Argentina pueda estar en igualdad de condiciones con el resto de los países productores y exportadores de este cultivo, los que poseen políticas que fomentan la exportación del mismo”, reseñó.