Un grupo de diputados y diputadas liderados por Máximo Kirchner presentó un proyecto para crear el Fondo Federal para el Desarrollo Nacional. La iniciativa, una suerte de reedición del llamado “fondo sojero” que funcionó hasta 2018, prevé destinar parte de la recaudación por retenciones a la exportación de soja a la financiación de obras de infraestructura en las provincias.
El proyecto plantea la necesidad de buscar alternativas para las provincias teniendo en cuenta que las medidas anunciadas en las primeras dos semanas de gobierno de Javier Milei tendrán “un impacto negativo en los ingresos de los estados provinciales y municipales, impidiendo el desarrollo de obras esenciales para sus comunidades”.
El Fondo permitirá “nutrir de recursos a las provincias para potenciar la infraestructura, la actividad económica y la demanda agregada, y permitiendo compensar los efectos del fulminante ajuste fiscal y la devaluación”.
En los fundamentos del proyecto se menciona que, entre las primeras medidas del presidente y el ministro de economía Luis Caputo se encuentra la decisión, “no solo de mantener las retenciones y aumentar la imposición exigible, sino también su extensión a productos que no estaban alcanzadas por las mismas”. Esto aumenta los ingresos del Estado nacional.
Esta situación, señalaron conlleva una caída en la recaudación que se producirá “como consecuencia de la contracción económica que generan las medidas tomadas desde el 10 de diciembre (devaluación, aumento de tarifas o liberación de precios) y que perjudica los ingresos coparticipables de las provincias”.
Desde el Poder Ejecutivo, tanto el presidente como su gabinete repiten una y otra vez que “no hay alternativa” ante cada decisión. “Sostener que la única manera que tienen las provincias de mejorar su recaudación es a través de la reposición de Ganancias, es ignorar que la propia caída del consumo de la población, por sólo dar un ejemplo, también impactará en los recursos coparticipables”, se explica en los fundamentos del proyecto.
"Contribuyan a la mejora de la infraestructura existente y potencien la competitividad de las economías regionales”.
El Fondo tiene como antecedente al “Fondo Federal Solidario (FFS), creado en 2009, y por medio del cual se concretaron innumerable cantidad de proyectos de inversión y obra pública en todas las regiones del territorio nacional, logrando de esta manera un canal de financiamiento con afectación especifica”. Mauricio Macri lo eliminó en 2018.
El nuevo Fondo Federal se financiaría, en caso de ser aprobado, con el 60% del total recaudado en concepto de derechos de exportación de la soja, en todas sus variedades y sus derivados. En este sentido, se propone que la distribución del se efectuará según los siguientes criterios: 10% distribuido de manera igualitaria entre todas las provincias, 35% distribuido entre las provincias de acuerdo a la población en base a los resultados del Censo 2022, un 35% según el porcentaje de la población en hogares con Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) existente en cada jurisdicción y un 20% distribuido entre las provincias en función del total de las toneladas de soja producidas en cada jurisdicción.
Estos porcentajes se actualizarán con una frecuencia anual en la fecha que se determinará en la reglamentación.
Los criterios de distribución planteados buscan articular tres grandes necesidades: el federalismo, la solidaridad con aquellas provincias que enfrentan altos índices relativos de Necesidades Básicas Insatisfechas y el estímulo a las provincias productoras de soja para que pueda seguir potenciando su capacidad productiva.
“Además, los recursos están vinculados a ingresos en dólares, lo que permite generar “una posición fiscal más sólida para nuestras provincias, actuando como un seguro de cambio para los ingresos provinciales y municipales ante eventuales devaluaciones que, de no cambiar el oriente de las medidas económicas futuras, se producirán”, señalan sus autores.
También “simplifica y colabora con la idea de reducir las transferencias no automáticas -calificadas habitualmente de discrecionales - como es deseo expreso del actual gobierno”.
Desde la Fundación Mediterránea, se estima que la recaudación en concepto de derechos a la exportación de soja para el año 2024 será de u$s 4.423 millones, lo que significa que, de crearse, “el Fondo Federal para el Desarrollo Nacional alcanzaría los u$s 2.654 millones”, señalan.
El proyecto lleva las firmas de Máximo Kirchner, Carlos Heller, Emiliano Estrada, Gabriela Estévez, Blanca Osuna, Graciela Parola, Mario “Paco” Manrique, Pablo Carro, Tanya Bertoldi, Paula Penacca, Christian Alejandro Zulli, Sergio Palazzo, Carolina Yutrovic, Itai Hagman y Julia Strada.