Desde que el joven realizador belga Lukas Dhont leyó en un diario el caso de la bailarina Nora Monsecour hasta que pudo hacer su propio largometraje sobre ella pasaron nueve años. Fue un tiempo fértil y movedizo para el realizador: salió de su propio closet para aceptar su homosexualidad, pasó del colegio a la escuela de cine y esculpió su talento en tres cortometrajes que lo prepararon para su bautismo de fuego. Aquel rito iniciático en términos profesionales y personales fue "Girl" (2018), filme dedicado a contar la historia de Nora, pero ahora bajo el nombre ficticio de Lara.
La película se estrenó el año pasado en la sección Una Cierta del Festival de Cannes y fue un éxito. Del desconocido Dhont, entonces con 26 años, nadie sabía nada, pero "Girl" escaló rápidamente a los primeros lugares en las listas de preferencia del encuentro. Al final del festival se fue con cuatro galardones: la Cámara de Oro a la mejor ópera prima, el premio de la Crítica, la Queer Palm a la mejor película LGBT (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales) y el premio al mejor actor en Una Cierta Mirada para el sorprendente Victor Polster, de 16 años. "Girl" no llegó a los cines argentinos, pero desde hace dos días está disponible en Netflix.
Victor Polster interpreta a Lara, una chica transgénero de 15 años que trabaja duro para ser bailarina clásica. Al mismo tiempo está en un agresivo tratamiento hormonal antes de la operación que le significará cambiar de sexo masculino a femenino. Aparece en cada escena de la película y no pasará mucho tiempo antes que la cámara muestre un desnudo frontal. Tampoco antes de que le caiga encima el infalible bullying de sus compañeras.
Valiente. Aunque "Girl" no es realmente una autobiografía del personaje que la inspiró, sin duda tiene elementos de su vida, de su lucha y de su valentía de querer convertirse en un ícono de feminidad y elegancia mientras se enfrenta a la visión binaria de la sexualidad en la sociedad. Así lo explicó Dhont: "A una edad muy joven, ella se eligió a sí misma por encima de las reacciones y expectativas de nuestra sociedad. Ella dijo: «Soy una chica, aunque tal vez la sociedad no esté de acuerdo con que yo lo sea, o que sea mi cuerpo; aún así decidiré quién soy y qué es lo que quiero hacer». Es un gran ejemplo para mucha gente. Algunas personas nunca llegan allí, algunas personas nunca llegan a permitirse ser sus versiones más auténticas de sí mismos", afirmó.
El filme fue celebrado unánimemente en Cannes, pero su llegada a América detonó las críticas de la comunidad trans, en particular después de saberse que era la candidata de Bélgica al Oscar y que sería estrenada en Netflix. Entre los principales reproches están la condición cisgénero (no transgénero) del actor principal y del director, pero también se ha reprobado "la perturbadora fascinación del director con el cuerpo trans" de la protagonista y la descripción de su tratamiento hormonal.
Cuestionamientos. El crítico cultural especializado en temas trans Oliver Whitney publicó una extensa columna en el influyente The Hollywood Reporter. En el título decía que "Girl" era un "daño para la comunidad transgénero" y que "enviaba el mensaje inexacto de que un tratamiento de reemplazo hormonal provocará más agonía a la persona trans". En esa misma columna llamaba a que la Academia de Hollywood no seleccionara a "Girl" para el Oscar extranjero. Una semana después el filme fue nominado a los Globos de Oro, pero quedó fuera de las nueve preseleccionadas a los Oscar.
Sobre la cuestionada elección del actor, el director dijo al portal Deadline: "Si hubiera habido una chica transgénero que viniera al casting, hubiera podido bailar en el nivel que Victor es capaz de bailar y actuar en el nivel en el que Victor puede actuar, si ella hubiera tenido la fortaleza para mostrarlo y no arrepentirse, inmediatamente habría dicho que sí, pero nunca pude encontrar a alguien así", admitió. Y también argumentó: "La mayor fortaleza del arte es la empatía. Las caracterizaciones en el cine son un puente. No queremos limitar a alguien a interpretar su propia identidad".
La versión real. A estas alturas, la mejor aliada de "Girl" es la propia bailarina belga Nora Monsecour, la inspiración de la película. Así lo dijo al portal de cine IndieWire: "Me ofende pensar que la gente cree que Lukas hizo la película desde su perspectiva cisgénero. Por el contrario: mi historia no es la fantasía de un realizador cisgénero. La historia de Lara es mi historia", aseguró. Luego, contundentemente, argumentó: "El director se interesó genuinamente en mí desde el principio. Trabajamos juntos desde el día uno".