El actor estadounidense Mickey Rourke, sex symbol en los años ochenta, regresó con victoria al boxeo a sus 62 años, en Moscú, después de haber colgado los guantes durante dos décadas.
El actor estadounidense Mickey Rourke, sex symbol en los años ochenta, regresó con victoria al boxeo a sus 62 años, en Moscú, después de haber colgado los guantes durante dos décadas.
Con un short rojo adornado con la bandera rusa, el actor, visiblemente en forma, golpeó con fuerza y de manera insistente a su rival, Elliot Seymour, un boxeador profesional estadounidense, 32 años más joven.
El combate, previsto a cinco rounds de 2 minutos y medio cada uno, duró apenas 4 minutos, el tiempo necesario para que Seymour, de 29 años, renunciara ante los ataques de Rourke. “Estoy muy contento por poder volver a subir al ring. Gracias a Dios por darme esta posibilidad”, declaró Rourke la víspera del combate.
“81,3 kilos”, anunció una voz por megáfonoo. El mismo peso que su rival, de 29 años. En los años ochenta, Rourke había sido portada de las revistas de cine, especialmente por su papel en la película "Nueve semanas y media” junto a Kim Basinger, otro mito erótico. Después, de 1991 a 1995, retomó la carrera de boxeador que había iniciado en su juventud y que le dejaron el rostro marcado por los golpes.