Los negocios vinculados a las tecnologías no paran de crecer. En los últimos cuatro años
registraron un crecimiento promedio anual de más del 20%, dos veces y media la suba PBI durante el
mismo período, y los especialistas del sector advierten que este fuerte dinamismo tiene que ver con
que el modelo económico nacional basa uno de sus pilares justamente en el consumo.
Celulares, iPods, televisores LCD o plasma, notebooks, consumo en telefonía móvil, accesos de
Internet de banda ancha, y algunos otros rubros marcaron la diferencia en el último tiempo, explicó
Alejandro Prince, presidente de la consultora especialista en tecnología Prince & Cooke, que
precisó que el consumo hogareño, y en parte el de las pymes, son responsables del crecimiento del
sector.
Un informe de la Cámara Argentina de Máquinas de Oficina, Comerciales y Afines (Camoca) da
cuenta de las buenas perspectivas tecnológicas. Sólo las notebooks ensambladas en la Argentina
triplicaron su participación en el mercado el año pasado, cuando absorbieron 15,6% de las 315 mil
unidades vendidas, frente a 4,5% de 141.000 unidades en 2006. En ese contexto, el ensamblado
nacional de portátiles pasó de 3 mil equipos en 2005 a 6 mil el años siguiente, y finalizó en
49.000 unidades en 2007, con lo cual en ese período el crecimiento fue del 1.633%.
Como muestra de esta tendencia está la realidad del negocio local de las notebook. Carlos
Airoldi, titular de AIR, destacó la buena performance de 2007 y marcó que para este año las
perspectivas también son interesantes. Aunque consideró que el negocio de venta de productos e
insumos para computación no seguirá creciendo al mismo ritmo que años anteriores, cuando primaba el
recambio producto del retraso tecnológico, destacó que los ensambladores locales de notebooks, como
su propia empresa, consiguieron que sus proveedores se comprometan con las entregas de los
componentes importados y esto les permitirá una mayor continuidad en la producción.
Esta situación se traducirá en una reducción de los costos. Según sus estimaciones, una laptop
básica que durante 2007 se conseguía a mil dólares a partir de marzo podrá comprarse a 700
dólares.
Airoldi indicó que el año pasado las estrellas de las ventas fueron las notebooks y los
monitores LCD. Prevé que durante 2008 se va a consolidar el mercado de las delgadas pantallas y
pronosticó, incluso, la desaparición este año de los viejos monitores de tuvo. En ese sentido,
indicó que la adquisición de estos productos se vio beneficiada por una importante baja de precios.
En el caso de los monitores LCD llegó al 15%.
Airoldi recordó que en los últimos años el negocio venía creciendo al 20% anual, por eso
vaticinó que este año la actividad aumentará a un ritmo más atenuado, producto de que se completó
la renovación derivada del atraso tecnológico poscrisis. “Esto nos lleva a analizar nuevos
caminos que puedan hacer crecer nuestro mercado”, señaló.
Al borde
Prince, por su parte, consideró que el sorprendente crecimiento del 20% anual registrado durante
los últimos cuatro años podría entrar en un ritmo más pausado. Durante 2007 las notebooks, las PC,
los televisores planos, las cámaras digitales y los teléfonos celulares fueron los productos
estrellas del mercado pero, aunque seguirán vendiéndose, el titular de la consultora asegura que
“seguramente será con tasas de crecimiento menores”.
“En un país con los niveles de pobreza que tenemos estamos al borde con las penetraciones
alcanzadas con 30 millones de celulares, 40% de usuarios de Internet, 7 millones de PCs, de haber
llegado al tope del universo atendible. Por supuesto, la reposición, en los casos de PC y celulares
garantizan y explican hoy más de las mitad de las ventas”, indicó.
Dentro del segmento participativo, “en grandes empresas hay que hablar de soluciones y
aplicaciones”. Dentro de lo nuevo “los web services tienen futuro cierto por delante,
seguridad en TIC, telefonía IP, la arquitectura SOA y lo habitual en ERP, servers y PCs”.
Un punto de interés para los consumidores pasa por el nivel de precios. Prince indicó que si
bien la tecnología tiene una tendencia natural a la baja, la complejidad y el uso intensivo hacen
que en realidad una persona o una empresa gasten o deban gastar cada vez más en tecnología de la
información como porcentaje de sus gastos totales.
Ante esta desaceleración del crecimiento, las exportaciones de software y servicios son un caso
aparte. “Un par de multinacionales explican más de la mitad de este movimiento creciente,
siendo el resto la suma de las ventas en el exterior de una centena o algo más de empresas pequeñas
y medianas locales”, dijo Prince.
Desde su punto de vista, “con la depreciación del peso y el dólar en descenso en el mundo,
esta tendencia tiene años por delante, y es de esperar que cuando esa política cambiaria se
modifique, las empresas locales hayan pasado de un modelo de exportación de valor, de creatividad,
de soluciones, y entonces algunos mantengan en alto ese rubro”.
El titular de la consultora Prince & Cooke también considera que el positivo escenario que
vive el sector tecnológico se encuentra opacado porque los proveedores no invierten en
infraestructura lo suficiente como para acompañar el crecimiento de redes y del parque de
equipos.
“Esto se debe fundamentalmente a la falta de definiciones por parte del gobierno, por
ejemplo, en temas como norma de televisión digital, la posibilidad de que las telcos brinden triple
play, la ley de telecomunicaciones y la de radiodifusión (viejos textos de épocas pretéritas en
términos tecnológicos), además del mal clima general de negocios e inversiones de base en el país,
el congelamiento de tarifas no ayuda tampoco”, señaló.
El titular de Prince & Cooke señaló que tampoco se vieron recuperados los niveles de
inversión en el segmento tecnologías de la información y la comunicación (TIC) de las grandes
empresas, sector que siempre fue el motor de este mercado.
“El mismo clima general hace que estos sectores no estén invirtiendo más que a niveles de
mantenimiento en su equipamiento TIC, se ven más cambios de logo o de propietarios que nuevas bocas
o sucursales, y los sectores con gran desarrollo como el agro o la construcción no tienen en las
TIC a su factor crítico, así que pueden crecer y mucho sin invertir gran cosa en estas
tecnologías”, agregó.
Las perspectivas del negocio tecnológico son interesantes pero podrían ser mejores si las
empresas líderes del sector suman inversiones para el desarrollo de la actividad.