Después de casi dos meses de indefiniciones, la Cámara baja santafesina avanzó ayer con la conformación final de su mesa directiva y terminó de diseñar un nuevo mapa político: la vicepresidencia primera del cuerpo, hasta el período anterior en manos del PJ, recayó sobre el radicalismo, mientras que la vicepresidencia segunda quedó en manos de Juntos por el Cambio (JxC). Todo un revés para el oficialismo, espacio de por sí minoritario en Diputadas y Diputados.
Luego de una cita parlamentaria caliente que se centró en la denuncia de un vacunatorio VIP en el hospital Eva Perón, ubicado en Granadero Baigorria, comenzó la Sesión Preparatoria —en pausa el 13 de mayo pasado— en la que Jimena Senn (UCR) y Gabriel Chumpitaz (JxC) se preparaban, al cierre de esta edición de La Capital, para quedar al frente de las vicepresidencias primera y segunda del cuerpo, respectivamente.
La reconfiguración de la Cámara baja fue detonada por la inesperada muerte de Miguel Lifschitz el 9 de mayo (hasta entonces titular del cuerpo), que si bien pegó de lleno en el Frente Progresista (FPCyS), también sacudió la relación con el oficialismo. Al respecto, el socialista ofició de gran ordenador de la coalición opositora y, al mismo tiempo, del vínculo legislativo con el justicialismo. Por eso el PJ había desandado 2020 al mando —a través de Lucila De Ponti— de la vicepresidencia primera de Diputadas y Diputados.
Pero rápidamente el radicalismo fue por ese casillero de la mesa directiva sacando chapa de segundo bloque más importante de la Cámara baja. Y fogoneó el corrimiento del peronismo a la vicepresidencia segunda.
De inmediato, el oficialismo ligó la jugada a una interna frentista, denunció la pretensión de ese sector de “no respetar las minorías” y aclaró que, en caso de no prosperar el consenso en torno a la continuidad de De Ponti en la vicepresidencia primera, dejaría a la oposición “llevarse puesta la institucionalidad”.
Avances
En los últimos días fue cobrando fuerza la intención, acicateada por la presidencia de la Cámara baja, de resolver sin mayores dilaciones el resto de la composición de la mesa directiva.
La rosca en tiempo de descuento desembocó en la ratificación de la posición del justicialismo y el avance de la propuesta de Chumpitaz para la vicepresidencia segunda del cuerpo.
En función de esas tratativas, Senn se encaminaba hacia la vicepresidencia primera, moción que cosechaba la abstención del PJ y del Frente Social y Popular (FSP, Carlos del Frade), entre otros.
Lo propio ocurría con Chumpitaz respecto de la vicepresidencia segunda, propuesta que también generaba la abstención del peronismo, al igual que el socialismo.
La Cámara baja santafesina cerró un prolongado proceso de reconfiguración política La Cámara baja santafesina cerró un prolongado proceso de reconfiguración política
Poco después de la muerte de Lifschitz, el frentista Pablo Farías fue electo el 13 de mayo casi por unanimidad —él se abstuvo— como titular de la Cámara baja, pero la falta de acuerdo político provocó la postergación de la definición de las vicepresidencias primera y segunda del cuerpo.
Si bien el consenso fue sólido en torno a Farías, las diferencias apuntaron a los restantes casilleros de la mesa directiva. El bloque de la UCR invirtió los papeles y, ya durante la Preparatoria de ese día, el diputado frentista Ariel Bermúdez (Creo) propuso postergar una semana la definición sobre sendos cargos. El justicialismo rechazó la moción y quiso saldar la discusión en el acto.
La iniciativa de Bermúdez terminó cosechando la negativa del peronismo, Igualdad, Frente Social y Popular y Fe. Y la Preparatoria pasó a un cuarto intermedio que se extendió hasta ayer.
La nueva conformación de la mesa directiva de Diputadas y Diputados deja atrás semanas de tratativas, muchas de ellas supeditadas a la evolución de Lifschitz, tendientes a destrabar una inédita situación institucional en la provincia: la suspensión de la Sesión Preparatoria, prevista por reglamento para el 25 de abril de cada año o el inmediato posterior si aquél fuere feriado. Y cierra el proceso de reacomodamiento de fichas en el tablero legislativo de Santa Fe.